Actualizado 22/03/2013 07:47

Iberoam.- La Relatoría de Libertad de Expresión alerta de que "prácticamente desaparecerá" con la reforma de la CIDH


WASHINGTON, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

La directora de la Relatoría para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Catalina Botero, ha advertido de que si este viernes se aprueba la propuesta de reforma de la CIDH, la Relatoría para la Libertad de Expresión "prácticamente desaparecerá".

Este viernes la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrará una sesión extraordinaria sobre la reforma de la CIDH, en base --principalmente-- a la propuesta formulada por los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).

La propuesta de reforma se divide en tres instrumentos: un proyecto de reforma reglamentaria, un programa de posibles reformas al Plan Estratégico de la CIDH, y un programa de cambio de prácticas, según ha informado la CIDH en su página web.

El proyecto contempla la modificación de los requisitos de las peticiones, la tramitación inicial, el procedimiento de admisibilidad, el procedimiento sobre el fondo, la imposición de medidas cautelares y provisionales, el plazo para el sometimiento de casos a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), el archivo de peticiones y casos, la designación de peritos y la elaboración de informes.

Uno de los puntos más controvertidos es el que propone limitar la financiación de la CIDH a la procedente de los países que la integran, lo que supondría un gran varapalo, ya que recibe numerosos recursos de Estados Unidos y Europa.

"Es fundamental para el funcionamiento de la CIDH y la protección a las víctimas contar con los recursos necesarios. Queremos evitar el riesgo de un estrangulamiento financiero", ha dicho Botero. "Si a la Relatoría para la Libertad de Expresión se le impide acceder a recursos de terceros, prácticamente desaparecerá", ha advertido.

En la misma línea, el presidente de la CIDH, José de Jesús Orozco, ha instado a los países miembros a "garantizar los recursos regulares consistentes con la magnitud del mandato de la CIDH de promover los Derechos Humanos en los 35 países de la OEA", en una rueda de prensa celebrada este jueves en la sede del bloque regional, en Washington.

SESGO ESTADOUNIDENSE

La reunión de hoy se celebrará en medio de las críticas de varios países latinoamericanos a la CIDH y al resto del SIDH, al considerar que no es neutral porque obvia las violaciones de los Derechos Humanos cometidas en Estados Unidos y acentúa o inventa las cometidas bajo gobiernos críticos con la Casa Blanca.

El más crítico con el SIDH es Venezuela, cuyo difunto presidente, Hugo Chávez, anunció en 2010 que se retiraba de la CIDH porque "es un cuerpo politizado utilizado por el imperio (Estados Unidos) para agredir a gobiernos como el venezolano".

Esta semana el presidente boliviano, Evo Morales, ha seguido su ejemplo, revelando que su Gobierno sopesa "seriamente" abandonar la CIDH porque "es como otra base militar (de Estados Unidos)". "A pesar de que no ha ratificado ninguno de los acuerdos para la defensa de los Derechos Humanos, la financia y alberga sus oficinas", ha indicado.

Otro detractor del SIDH es el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, que la semana pasada presentó un pliego de propuestas para reformar la CIDH, especialmente sus relatorías, advirtiendo de que, de lo contrario, podría abandonarlo.

En este contexto, el vicesecretario de Estado de Estados Unidos, William Burns, ha denunciado, en un artículo publicado en el diario 'The Miami Herald', el "ataque" contra la CIDH de "una minoría de Gobiernos que trata con determinación de socavar su autonomía y su integridad.

En este sentido se ha expresado también el ex presidente colombiano César Gaviria en 'The Washington Post'. "De ser implementadas, estas reformas debilitarán severamente a la CIDH y le pondrán más fácil a los gobiernos el ignorar derechos básicos, así como limitar la libertad de expresión", ha escrito.