Por Lizbeth Diaz
TIJUANA, México (Reuters/EP) - Diecisiete adolescentes, muchos de ellos acusados de trabajar como sicarios para carteles del narcotráfico, escaparon el jueves de un centro de detención juvenil cerca de la frontera con Estados Unidos tras hacer un hoyo en un muro externo.
Los muchachos, supuestos miembros jóvenes de carteles narcos a los que se suele apodar "narco juniors", hicieron un gran agujero raspando en una pared de ladrillos con una barra de metal durante el horario nocturno en el centro de detención en Tijuana, dijo un portavoz de la policía.
"Hicieron un agujero y nadie se dio cuenta. Luego golpearon a dos guardias con la barreta y salieron a través de la pared", dijo el portavoz de la policía estatal de Baja California, quien pidió no ser identificado.
La policía lanzó una búsqueda apoyada con helicópteros para recapturar a los evadidos, y al menos dos de ellos han sido apresados.
México ha sufrido más de 20 fugas de centros de detención en el año. El presidente Felipe Calderón ha centrado su mandato en aplastar al narcotráfico y la violencia que este genera.
En Tijuana, la mayoría de los adolescentes que escaparon están acusados de traficar drogas o actuar como sicarios en la transitada ciudad fronteriza.
Pero debido a su condición de menores de edad, bajo la ley mexicana no pueden ser encarcelados o acusados por delitos relacionados con la droga, y permanecen en centros de detención.
Unas 12.800 personas han muerto en México por la guerra entre carteles del narcotráfico y de estos con las fuerzas de seguridad desde fines del 2008.