Actualizado 11/12/2015 18:11

Lula: "Maduro tiene que aprender que la democracia es alternancia en el poder"

Juan Luis Cebrián, Felipe González y Lula Da Silva
EUROPA PRESS

   MADRID, 11 Dic. (Notimérica) -

   El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva ha indicado este viernes que el presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Eduardo Cunha, ha decidido tramitar el 'impeachment' contra la presidenta Dilma Rousseff, pensando "en su propia supervivencia", al tiempo que se ha manifestado sobre la situación política de otros países como Venezuela. "(Nicolás) Maduro tiene que aprender que la democracia es alternancia en el poder", ha señalado.

   En un foro en Madrid organizado por el diario español 'El País', Lula, acompañado del expresidente español Felipe González, ha indicado que Cunha, que está acusado por supuestamente haber recibido 5 millones de sobornos en el escándalo de la estatal Petrobras, ha decidido atacar a Rousseff para cubrirse las espaldas en un movimiento político injustificado.

   Según el expresidente, Rousseff implementó políticas económicas necesarias ante la situación de crisis del país, mientras trataba de que no tuvieran que "bajar un peldaño" los 40 millones de personas que dejaron atrás la pobreza y los 36 que se incorporaron a la clase media durante sus ocho de gobierno -el de Lula--. Con ello, ha justificado las 'pedaladas' o maniobras que la mandataria realizó con los presupuestos del Estado y que sus enemigos políticos tildan de ilegales.

   Sin embargo, el que fue jefe sindicalista reconoce los errores de su partido y el de la actual mandataria, el Partido de los Trabajadores (PT), que han generado el descontento entre los brasileños. "Vencimos las elecciones (en 2014) y después de las elecciones hicimos cosas que habíamos dicho que no haríamos: recortar y faltar a los derechos de los trabajadores", ha indicado.

   "Estuviera equivocada o no, había cosas en las que la presidenta tenía que cambiar", ha señalado. Pero para el expresidente lo más complicado de resolver no es la crisis económica que atraviesa Brasil y que ha puesto a Rousseff contra las cuerdas. "Habrá seis meses de agonía o sufrimiento, pero Brasil no tardará mucho más en recuperarse", ha vaticinado.

"Yo tenía 67 años cuando descubrí que tenía cáncer", ha recordado el expresidente, que superó en 2012 un cáncer de laringe que le había sido detectado el año anterior. "Es lo mismo para la economía brasileña", ha puesto como ejemplo Lula, refiriéndose a que Brasil sufre una enfermedad económica de la va a recuperarse.

   Tampoco le preocupa la corrupción que ha destapado la Operación Lava Jato, que investiga el escándalo de Petrobras. "Pocos países del mundo tienen las instituciones que nosotros tenemos para combatir la corrupción", ha asegurado, al tiempo que ha afirmado "en Brasil tanto el presidente como el brasileño escondido en el último rincón saben que tienen que hacer las cosas bien para no ser molestados (por la Justicia)".

   Sin embargo, sí se encuentra preocupado por la crisis política que atraviesa Brasil, una crisis que trasciende a la económica. El problema para él es también de dimensión global. "La política se ha subcontratado, los presidentes se reúnen, deciden algo que después pasa por los burócratas. Los burócratas son gente preparada para decir que no", ha explicado.

CRISIS DE GOBERNANZA

   Por su parte, González ha coincidido en definir la crisis brasileña como algo "coyuntural" y ha subrayado que los países atraviesan "una crisis de democracia representativa", pero "no sólo en América, también en Europa".

   Sin embargo, ha llamado a luchar contra el "liquidacionismo" que representa la extrema derecha de Marine Le Pen o la extrema izquierda de Nicolás Maduro en Venezuela, y ha pedido que se conserve el sistema democrático, a pesar de sus defectos.

"En Argentina se producen unas elecciones, gana (Mauricio) Macri, hay una profunda división, pero se puede corregir", ha afirmado el expresidente español en alusión a los comicios presidenciales que tuvieron lugar el pasado mes de octubre en el país y en los que venció el candidato de centro-derecha tras 12 años de kirchnerismo.

   Por su parte, Lula ha sido positivo respecto a los últimos 12 años de la política Latinoamericana y respeto al momento actual. "No se preocupen. Macri entiende perfectamente su papel en Argentina y en América Latina. Cuando uno asume como presidente uno deja de hacer lo que cree y hace lo que puede y cree necesario para su país", ha precisado.

   Lula ha aplaudido que en los últimos años, en América Latina, se hayan elegido líderes como el expresidente uruguayo José Mujica o el presidente indígena de Bolivia, Evo Morales. "Cuando yo lo vi por primera vez (a Mujica) pensé que era un loco, con esas vestimentas, ese aspecto, pero ha resultado ser un personajes extraordinario", ha afirmado.

   Sin embargo, ha tenido palabras más duras para el presidente venezolano, Nicolás Maduro, que ha visto disminuido de manera significativa el poder de su partido en las elecciones del pasado domingo, cuando la oposición logró obtener dos tercios de los asientos de la Asamblea Nacional. "Todo el mundo sabe que yo tuve buena relación con (Hugo) Chávez, pero no con el actual presidente. Maduro tiene que aprender que la democracia es alternancia en el poder", ha destacado.

   Por otro lado, Lula se ha pronunciado también sobre la recuperación de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba. "No hay ninguna explicación para mantener el bloqueo contra Cuba. Es una venganza, están esperando que Fidel (Castro) muera, no es justo", ha indicado.

   En este sentido, el expresidente brasileño ha explicado que la población cubana está bien formada en términos educativos y merece una oportunidad. "Brasil vigilará para que el proceso de cambio de la mano de Raúl Castro sea lo más tranquilo posible".

   Preguntado por su impresión sobre el Papa Francisco, Lula ha indicado que "por primera vez un Papa representa a la comunidad cristiana". Del pontífice ha destacado su importante papel en la política internacional y su carácter moderado.

LAS RELACIONES ECONÓMICAS UE-AMÉRICA 

   Por su parte, González ha lamentado que tras 20 años de negociaciones el Mercosur y la Unión Europea no hayan llegado a un acuerdo birregional.

   En este sentido, Lula ha indicado que en los últimos 12 años brasileños y latinoamericanos han avanzado notablemente en reconocerse mutuamente. "Brasil y América del Sur estaban enfrentados desde la Guerra Fría", ha señalado.

   "En América Latina tenemos que hacer cosas nuevas, en la moneda de nuestros países, son dólar, acuerdos con China, Rusia y la Unión Europea. En tiempos de crisis hay que aumentar el comercio, las relaciones. No hay ninguna fórmula mágica", ha expresado.

   Por ello, González ha recomenzado a los empresarios españoles "aprovechar este momento" para invertir en América Latina y Brasil. "En este momento las seguridades a medio plazo son más consistentes que en Europa. El PIB de América Latina es tres veces mayor que el de China y (la región) cuenta con las clases medias que no tiene China", ha insistido.

   El expresidente brasileño, que visita España en un momento delicado en Brasil por la acuciante crisis económica y la sobra amenazante del 'impeachment', se reunió este jueves con el Rey Felipe VI después de concluir su viaje a Alemania, donde intervino en una conferencia internacional del Partido Social Demócrata junto al presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz.