NUEVO LAREDO (MÉXICO), 11 Mar. (EP/AP) -
Un locutor de radio que también trabajaba para un servicio de emergencias fue asesinado la madrugada del viernes por hombres armados que lo esperaban frente a su casa en esta violenta ciudad fronteriza.
El locutor, identificado como Ramiro Téllez Contreras, de 45 años, que también fue policía federal, recibió dos impactos de bala en el cuello y dos más en el pecho, informó la policía estatal en un comunicado.
Los testigos dijeron a las autoridades que Téllez fue atacado alrededor de las 5:45 de la mañana cuando regresaba a su casa después de concluir su trabajo en el servicio para atender emergencias.
Téllez se convirtió en la víctima mortal número 46 este año en esta ciudad de 330.000 habitantes fronteriza con Estados Unidos.
Las autoridades dijeron que la mayoría de las muertes se deben a una guerra por territorios que se disputan dos cárteles de la droga por las lucrativas rutas de introducción de narcóticos hacia Estados Unidos.
Téllez era el locutor principal de un programa de información general de la cadena nacional de radio EXA, y cubría temas políticos y policiales, entre otros.
En su trabajo en el servicio estatal de emergencias dirigía un centro que recibía llamadas telefónicas que solicitaban ayuda, parecida a la que funciona en Estados Unidos bajo el número 911.
El Gobierno estatal no hizo comentarios en cuanto a si el asesinato estaba relacionado con el trabajo de Téllez.
El jueves, pistoleros en el estado central mexicano de Michoacán abatieron a tiros a Jaime Alvaro Olvera, un ex fotógrafo del diario La Voz de Michoacán, informó la policía estatal.
El procurador del estado de Michoacán, Jorge Luis Mejía, dijo que Olvera, de 38 años, dejó La Voz en el 2003 para trabajar de tiempo completo como vendedor.
Sin embargo, La Voz informó que Olvera seguía trabajando independientemente como fotógrafo, con imágenes de informaciones policíacas para los diarios locales.
Olvera fue herido de muerte en el cuello cuando llevaba a su hijo de cinco años a la escuela, dijo Mejía. El menor escapó ileso a la agresión.