El escritor mexicano culmina con 'No será la tierra' su "pesimista" trilogía sobre el siglo XX a través de "una mirada femenina"·
SANTANDER, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El escritor mexicano Jorge Volpi considera que 2006 es, con los conflictos postelectorales y las muertes registradas en las revueltas de Oaxaca, "uno de los peores años de la historia mexicana reciente", un período que, "como dice la maldición china, interesante, pero por ello mismo terrible". Así lo destacó Volpi en su presentación a la prensa de su última novela, 'No será la tierra', obra que analizará también a las 20.00 horas de hoy en la Tribuna Literaria de Caja Cantabria.
Con 'No será la tierra' Volpi ha cerrado su trilogía sobre el siglo XX, a través de "una mirada esencialmente femenina", que sin saberlo, desembocó según iba escribiendo las páginas en una historia "pesimista", con "muy poco ámbito para la esperanza".
Para el miembro del Sistema Nacional de Creadores de México, "el ser humano no es capaz de aprender de sus errores", de evitar "guerras, conflictos, discriminación", pues "cada vez que pasa algo terrible en el siglo XX se dice nunca más, y ese nunca más es siempre falso", pues "siempre hay más de lo peor".
'No será la tierra' (Alfaguara, 2006) analiza los últimos 25 años del siglo pasado a través de sus tres protagonistas, una bióloga soviética que contempla el derrumbe del comunismo y sus "difíciles relaciones" con su marido, primero disidente y al final asesor científico de Boris Yeltsin, y su hija, primera "gran víctima" del triunfo del capitalismo ruso.
En el otro extremo del mundo, una economista, que acaba de responsable del programa de privatización de las empresas estatales en Rusia, mantendrá también unas "terriblemente complicadas" relaciones con su marido y con su hermana, activista contra la globalización.
Por último, una experta en informática, nacida en Hungría, pero educada en Estados Unidos, "dominada por su ansia de conocer los mecanismos de la inteligencia", y que terminará "atrapada en sus constantes estados de ánimo" y en sus sucesivos amantes, es el tercer pilar de este "contrapunto" entre personajes históricos y la historia íntima de personas que intentan "sobrevivir" a "transformaciones brutales en su entorno".
Volpi aseguró que eligió a personajes femeninos para "reflejar de alguna forma la transformación del papel de la mujer" en unos momentos históricos -fin de la Guerra Fría, caída del Muro del Berlín y descomposición de la Unión Soviética- que "estuvieron hechos esencialmente por decisiones de hombres".
APRENDER A ESCRIBIR
Tras los "diez años de trabajo" que le llevó escribir la trilogía -completada por las obras 'En busca de Klingsor' (Seix Barral, 1999) y 'El fin de la locura' (Seix Barral, 2003)- y "más de 1.600 páginas de historias con mayúscula y minúscula", Volpi aseguró que ahora necesita "volver a aprender a escribir".
"Cuando crea que ya lo haya logrado", añadió, intentará "hacer alguna otra cosa", quizás sobre los últimos acontecimientos de México, un país del que "me siento cerca" aunque viva en otros lugares. "Aunque haya escrito una novela sobre Rusia esencialmente", -en alusión a 'No será la tierra'-, "de forma metafórica creo que sigo hablando sobre México".
Volpi es autor de las novelas 'A pesar del oscuro silencio' (1993); 'La paz de los sepulcros' (1995), y 'El temperamento melancólico' (1996); así como de los relatos cortos 'Días de ira' (en el volumen Tres bosquejos del mal, 1994); 'Sanar tu piel amarga' (1997) y 'El juego del Apocalipsis' (2000).
Es autor, asimismo, del ensayo 'La imaginación y el poder. Una historia intelectual de 1968' (1998), y de la antología de jóvenes cuentistas mexicanos 'Día de muertos' (2001).
Su novela 'En busca de Klingsor' obtuvo los premios Biblioteca Breve, Deux Océans y Grinzane Cavour, y el de mejor traducción del Instituto Cervantes de Roma en 2002, y supuso su consagración internacional al ser publicada en diecinueve idiomas.
Está licenciado en Derecho y en Letras Mexicanas por la UNAM y es doctor de Filología Hispánica por la Universidad de Salamanca. Actualmente, Jorge Volpi es miembro del Sistema Nacional de Creadores de México y becario de la Fundación J. S. Guggenheim., además de colaborador en el suplemento cultural mexicano 'Confabulario' con la columna 'Crónicas Medioevales', y en las revistas 'Viceversa', 'Letra Internacional' y 'Letras Libres'.