Actualizado 01/01/2015 23:53

Los padres de los 'normalistas' despiden el año pidiendo justicia

Activists and relatives of the 43 missing students of the Ayotzinapa Teacher Tra
Foto: TOMAS BRAVO / REUTERS

MÉXICO DF, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Los padres de los 43 'normalistas' de Ayotzinapa desaparecidos desde el pasado mes de septiembre terminaron el año exigiendo justicia frente a la residencia del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, que se saldó sin incidentes.

   Los manifestantes se congregaron en la tarde del miércoles frente a las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) y desde allí marcharon hasta la residencia de Peña Nieto, Los Pinos.

   Como en protestas anteriores desde que los 43 jóvenes desaparecieran durante una protesta en Iguala, en el estado de Guerrero, el 26 de septiembre, se repitieron eslóganes como "¡los queremos de regreso con vida!" y "¡Gobierno represor!". Según informa el diario 'El Universal', en la marcha participaron unas 300 personas acompañadas por visitadores de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

   Uno de los padres de los desaparecidos aseguró durante el mitin que celebraron que no pararán hasta encontrar a sus hijos. "Hay que poner un alto a estas injusticias; queremos vivos a nuestros hijos", afirmó, dejando claro que los familiares no creen que los jóvenes estén muertos.

   Según el diario, el mitin concluyó sin mayores incidentes, aunque ya entrada la noche algunos manifestantes colgaron unas piñatas en las inmediaciones de Los Pinos con figuras entre otros del presidente Peña Nieto, a las que prendieron fuego.

CASO IGUALA

   Los 'normalistas' llegaron a Iguala el 26 de septiembre para recaudar fondos para viajar a la capital mexicana el 2 de octubre con el fin de participar en la conmemoración de otra matanza, la de Tlatelolco.

   Ese día la esposa del alcalde tenía previsto presentar un informe de su labor al frente del Sistema de Desarrollo Integral para la Familia municipal y, ante el temor de que los estudiantes reventaran el acto, como ya había ocurrido en el pasado, el alcalde ordenó a la Policía actuar contra los 'normalistas'.

   Policías de Iguala, apoyados por agentes de Cocula, interceptaron a los jóvenes a la entrada del municipio y abrieron fuego, matando a uno de ellos y dando lugar a un enfrentamiento que se saldó con seis muertos y 25 heridos.

   Una vez controlada la situación, detuvieron a los 'normalistas' que no consiguieron huir, les condujeron en varios furgones policiales a los límites entre Iguala y Cocula y se los entregaron a Guerreros Unidos. Este grupo armado presuntamente los mató en un vertedero cercano y posteriormente los quemó y arrojó sus cenizas en bolsas a un río cercano. Hasta la fecha se ha recuperado al menos una bolsa y los restos hallados han permitido identificar a uno de los desaparecidos.