Actualizado 07/06/2015 19:04

Padres de los 'normalistas' queman 14 mesas electorales en Tixtla, Guerrero

Elecciones México
REUTERS


MÉXICO DF, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

Padres y compañeros de los 43 estudiantes 'normalistas' --estudiantes de magisterio-- de Ayotzinapa han quemado hasta 14 mesas electorales en la localidad de Tixtla, en Gerrero, en un acto de protesta contra las elecciones parciales que se celebran este domingo en México. En el ataque han participado varios encapuchados y el portavoz de las familias de los desaparecidos en Iguala en septiembre, Felipe de la Cruz.

En un primer momento, los activistas pidieron pacíficamente a las autoridades la entrega del material electoral y los responsables al parecer pidieron tiempo para decidir. Sin embargo, los normalistas no lo aceptaron y de inmediato comenzaron a prenderle fuego a las papeletas y al material electoral. De la Cruz ha advertido que estas acciones se repetirán en todo Tixtla como parte del boicot electoral, informa el diario 'Milenio'.

En otras colonias de Tixtla, los propios vecinos han recibido a pedradas a los estudiantes para evitar el boicot electoral. Por el momento hay dos personas heridas por pedradas en la cabeza.

Horas antes, centenares de estudiantes, profesores y activistas se han manifestado precisamente en Tixtla en contra de las elecciones en el municipio y ante las que han pedido la abstención.

Los asistentes han coreado cánticos en contra de las elecciones y han pedido la aparición con vida de los normalistas, además de pegar propaganda electoral a lo largo del recorrido, según ha recogido el diario mexicano 'La Jornada'.

CASO IGUALA

Los 43 'normalistas' llegaron a Iguala el 26 de septiembre para recaudar fondos para viajar a la capital mexicana el 2 de octubre con el fin de participar en la conmemoración de otra matanza, la de Tlatelolco, en Ciudad de México.

Ese día la esposa del alcalde tenía previsto presentar un informe de su labor al frente del Sistema de Desarrollo Integral para la Familia municipal y, ante el temor de que los estudiantes reventaran el acto, como ya había ocurrido en otras ocasiones, el alcalde ordenó a la Policía actuar contra los 'normalistas'.

Las investigaciones apuntan a que los policías entregaron a los activistas a miembros del crimen organizado, quienes los habrían asesinado, aunque solo han aparecido los restos de algunas de las víctimas.