MÉXICO DF, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, ha pedido este miércoles que se le conceda un año de confianza para estudiar los resultados de su nuevo plan contra la violencia después de que su predecesor, Felipe Calderón, iniciase una política de enfrentamiento directo durante su sexenio presidencial (2006-2012), en el que murieron más de 70.000 personas en actos violentos.
"En un año se podría hacer un balance, un corte a un año, creo que podemos estar viendo, espero, resultados favorables, una reducción sensible, pero también espacio para hacer los ajustes necesarios a la estrategia que se esta instrumentado", ha explicado.
Sin embargo, el mandatario ha precisado que este voto de confianza no implica que "necesariamente en un año se logre" el fin de la violencia en el país. En un acto en la Embajada mexicana en Roma, Peña Nieto ha explicado que su plan va dirigido a todas las regiones de México, con diferentes planes según las "particularidades" de cada zona.
Según el diario 'El Universal', el presidente ha recordado que su plan divide el país en cinco regiones y contempla la celebración de reuniones entre los gobernadores y los responsables del Ejército, la Armada, la Procuraduría General y la Policía Federal.
"Esta estrategia debe estar mostrando resultados y una disminución sensible de la violencia en un mediano plazo", ha comentado. "Creo que es pronto para hacer una evaluación de los resultados, pero en un mediano plazo podemos tener un balance, que espero sea satisfactorio y nos permita acreditar en la efectividad de esta estrategia al lograr una disminución sensible de la violencia", ha apostillado.
En los cien días que lleva Peña Nieto en el Ejecutivo, tras asumir la Presidencia a principios de diciembre, se han producido más de 3.000 muertes violentas relacionadas con el crimen organizado, según los datos ofrecidos por la Secretaría de Gobernación.