Actualizado 29/10/2006 01:45

Nicaragua.- El candidato conservador a la presidencia asegura que las encuestas que le dan como perdedor se equivocan


MANAGUA, 28 Oct. (EP/AP) -

El candidato presidencial de la Alianza Liberal Nicaragüense, Eduardo Montealegre, declaró hoy que el líder sandinista Daniel Ortega en realidad está en el último lugar y no en el primero, como revelan las encuestas publicadas antes de la próxima cita electoral del 5 de noviembre.

"Yo creo en la inteligencia del pueblo nicaragüense y estoy seguro que no quiere regresar al pasado y me dará su voto para continuar avanzando y no retroceder", afirmó el antiguo banquero en su residencia de las sierras de Managua con vista al Lago Xolotlán en una entrevista concedida a AP que recoge Europa Press.

El candidato presidencial afirmó que "todo el mundo sabe lo que pasó durante el régimen de Ortega. Nos dejó en un hoyo del cual vamos saliendo poco a poco y que en vez de invertir recursos hemos estado resolviendo situaciones macroeconómicas desastrosas". "Ortega es tan culpable por lo que hizo en los ochenta, como por lo que ha hecho gobernando desde abajo con tranques y asonadas, impidiendo, truncando las esperanzas de muchas personas", agregó.

Al ser preguntado por la ventaja que dan a Ortega las últimas encuestas no dudó en aseverar "no es cierto. Está de último, porque la mayoría del pueblo nicaragüense está votando contra él".

La última encuesta de la firma Cid Gallup dio a Ortega un 33% de intención de voto, frente al 22% de Montealegre; 17% del candidato del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), José Rizo, y 13% al candidato disidente sandinista, Edmundo Jarquín, del Movimiento Renovador Sandinista (MRS). Ortega podría ganar en una primera vuelta si obtiene un 35% de los votos y se coloca cinco puntos porcentuales sobre su más cercano rival.

"Estamos trabajando para decirle al pueblo de Nicaragua que no se dejes engañar, que compare en quien ha hecho y quien no ha hecho, quien puede generar empleo y quien va a generar desempleo", dijo.

Montealegre, que vivió en el exilio en la década de 1980 tras la llegada al poder de los sandinistas, quienes nacionalizaron el banco de su padre, dijo que la pobreza se combate con más empleo y que para ello es necesario atraer la inversión lo cual difícilmente podría hacer Ortega por sus malas relaciones con el exterior, según adujo.

"Estados Unidos no quiere nada con él y los europeos no aceptan que un presidente sea acusado de violar a su propia hija. Entonces ¿quién le va dar recursos? ¿Chávez?", explicó. "Chávez lo que ha hecho es llevar a su país del 40 al 60 por ciento de pobreza aún con el petróleo", aseguró el candidato conservador.

"La única manera de disminuir la pobreza es generando riqueza para distribuirla", dijo el candidato a quien sus adversarios lo acusan de ser un ex banquero "insensible" a la problemática social en un país donde el 80% de sus habitantes es pobre.

"No soy insensible. Hasta he dejado de ser banquero. Todo lo que dicen de mi son calumnias. No hay ninguna acusación contra mí. Los culpables son los que quebraron los bancos", dijo, ante las constantes acusaciones que le señalan como el benefició de la quiebra de varias entidades financieras bancos.

Montealegre, ministro del ex presidente liberal Arnoldo Alemán, condenado a 20 años de cárcel por fraude al Estado y lavado de dinero, dijo que el país necesita "estabilidad y transparencia institucional, estabilidad macroeconómica, mejor salud y mejor educación, independencia energética y un presidente que sepa atraer inversión".

El ex banquero fundó la Alianza Liberal Nicaragüense, una escisión del Partido Liberal de Alemán, tras ser expulsado y acusado de ser un traidor.

Montealegre calificó a Alemán como "aprendiz de dictador" y a Ortega como "un mentiroso e indudable dictador".