Actualizado 18/07/2009 04:32

Obama presiona por reforma de salud, críticos rechazan costos

Por Jackie Frank

WASHINGTON (Reuters/EP) - El plan del presidente Barack Obama para garantizar atención de salud a todos los estadounidenses afrontó más problemas el viernes por su costo estimado de 1 billón de dólares, obligando a los demócratas a buscar formas de reducir gastos para impulsar el proyecto.

Obama habló sobre el tema públicamente, insistiendo en que "ahora no es el momento de desacelerar" el esfuerzo para supervisar al atribulado sistema.

"Ahora tenemos que pasar la línea de meta, y parte del proceso es descubrir cómo pagar por esto", dijo en la Casa Blanca.

Tres de cinco comisiones del Congreso han concordado en una reforma a la industria de la salud de 2,5 billones de dólares, con la implementación de un plan de seguros de salud administrado por el Gobierno para competir con las aseguradoras privadas.

Además, daría cobertura de salud a muchas de los 46 millones de personas sin seguro y aliviaría la carga de los altos costos médicos a millones más.

La popularidad de Obama le ha otorgado el capital político para lograr un acuerdo con los legisladores. Una demora hasta el 2010, año de elecciones en el Congreso, podría dificultarles llegar a un acuerdo final.

Pero hay desacuerdo entre los propios demócratas. Setenta legisladores han dicho que los costos de salud deben ser recortados para dar su respaldo al proyecto.

Además, surgieron dudas acerca de los costos de la reforma el jueves, cuando analistas del Congreso dijeron que los planes que se consideraban no controlarían los crecientes costos. Republicanos y demócratas pidieron más controles en la escala y costo del plan.

Aunque la mayoría de los estadounidenses tiene seguros parcialmente pagados por sus empleadores, los costos de la salud son una gran preocupación para muchos, especialmente en medio de una recesión.

La Comisión de Medios y Arbitrios de la Cámara Baja acordó una legislación el lunes que recaudaría 544.000 millones de dólares durante 10 años para pagar por el plan estimado en 1 billón de dólares, en parte elevando los impuestos sobre los ciudadanos más ricos.

Un segundo panel aprobó una legislación que garantizará que ningún ciudadano pueda ser rechazado para obtener un seguro de salud. Además, requerirá que la mayoría de los empleadores contribuyan para los seguros de los trabajadores o enfrenten penas.