Actualizado 29/06/2009 23:48

Oposición Argentina pide cambio a derrotado Gobierno

Por Guido Nejamkis

BUENOS AIRES (Reuters/EP) - La oposición argentina, revitalizada por un triunfo electoral, reclamó el lunes a la presidenta Cristina Fernández urgentes cambios en su hermético estilo de gobernar, y le pidió enfrentar la alta inflación y la inseguridad pública que su administración no reconoce.

Fernández y su esposo, el ex mandatario Néstor Kirchner, perdieron el control del Congreso en las elecciones legislativas que Argentina celebró el domingo, que también sirvieron para impulsar candidaturas de varios opositores a la presidencia del país en el 2011.

"Las necesidades del país no tienen otra cosa que la urgencia. Hay que ocuparse del campo, de la seguridad, de la salud", dijo Francisco De Narváez, el empresario de una facción disidente del peronismo gobernante que venció a Kirchner en la elección en la clave provincia de Buenos Aires.

Argentina enfrenta una expansión de la gripe H1N1 que ya provocó la muerte de 26 personas, y que llevó a la ministra de Salud, Graciela Ocaña, a presentar su renuncia el lunes.

Además, el Gobierno de Fernández está agriamente enfrentado con el poderoso sector agropecuario, cuya producción viene decayendo por factores climáticos y las políticas oficiales de controlar precios y limitar exportaciones.

"O Argentina abandona el hegemonismo (de los Kirchner) y se y se crea un clima de unidad nacional o esto va ir de mal en peor", dijo por su parte Felipe Solá, diputado electo y aliado De Narváez.

Kirchner, que lideró la lista de candidatos a diputados por la provincia de Buenos Aires, reaccionó ante la derrota presentando su renuncia "indeclinable" a la presidencia del gobernante Partido Justicialista (peronista), pero disidentes de la agrupación dijeron que la decisión era insuficiente.

"No importa el partido peronista ahora, importan los problemas de Argentina", dijo Solá en alusión al debilitamiento de la economía, la menguante producción agrícola y ganadera, y la preocupante cuestión sanitaria.

C&A, una de las mayores tiendas minoristas del mundo, anunció el lunes que abandonará Argentina, donde tiene 20 tiendas y emplea a 1.100 personas.

El revés para el matrimonio que gobierna Argentina desde el 2003 con un estilo áspero y políticas intervencionistas impulsó el lunes el peso, las acciones y los bonos del país.

El Gobierno reconoció un nuevo marco político que lo obligará a negociar, y no imponer, la aprobación de su agenda.

Tras su sorprendente victoria en Buenos Aires, De Narváez pidió a Fernández, a cargo de una problemática presidencia oscurecida por la influencia de su esposo, que "asuma el rol protagónico que nunca debió dejar".

El traspié podría dejar a Kirchner, que gobernó Argentina entre el 2003 y el 2007, fuera de la carrera para las próximas presidenciales marcadas para el 2011.

Una fuente del Gobierno que pidió el anonimato dijo que Fernández, quien hablará en la tarde del lunes en la Casa de Gobierno, podría reemplazar a varios ministros.

El Gobierno había apostado fuerte a conseguir una holgada victoria en Buenos Aires, pero acabó perdiendo esa provincia junto a otros grandes distritos como Córdoba, Santa Fe, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mendoza y hasta la patagónica Santa Cruz, cuna política de Kirchner y su cónyuge.

"La falta de quórum propio en ambas cámaras (...) obligará al oficialismo a diseñar estrategias parlamentarias de alianzas", dijo el analista político y encuestador Artemio López, de la consultora Equis.

Contando los votos de las 24 provincias argentinas, los candidatos oficialistas obtuvieron alrededor del 34 por ciento, muy lejos del 66 por ciento de la oposición.

Para el analista Rosendo Fraga, "gobernar sin el Congreso no es fácil, éste va a ser el gran desafío del oficialismo. Las dos veces que un Gobierno perdió el control del Congreso fue una situación de gobernabilidad difícil".

"El resultado electoral es bueno porque debería marcar un cambio (en la gestión de Gobierno). Lo que necesitamos es confianza y que vengan capitales del exterior", dijo Rodolfo Rossi, un ex presidente del Banco Central de Argentina.

NUEVO CONGRESO, CANDIDATOS

El Acuerdo Cívico y Social, una fuerza de centro, se convirtió en la mayor agrupación opositora no peronista y tendrá el principal bloque de diputados a nivel nacional.

Carlos Reutemann, ex piloto de Fórmula Uno que desafió al candidato oficialista en Santa Fe, fue otro de los triunfadores y aparece en el horizonte como presidenciable por el peronismo, en el que el liderazgo de Kirchner quedó frágil.

En las elecciones del domingo se renovaron la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.

La agrupación política apoyada por el vicepresidente de la Nación, el radical Julio Cobos, devenido en opositor, arrasó en Mendoza, lo que dio sustento a sus pretensiones presidenciales.

En la Ciudad de Buenos Aires, capital del país, se impuso el PRO, fuerza que lidera el alcalde Mauricio Macri, aliado de De Narváez y quien también se proyecta como una figura a disputar el poder en las próximas presidenciales del 2011.

La nueva legislatura asumirá en diciembre del 2009.