Actualizado 21/09/2015 10:22

El Papa Francisco se reúne con Raúl Castro

MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El Papa Francisco se ha reunido este domingo con el presidente de Cuba, Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución, encuentro que se ha extendido durante cerca de media hora y que ha finalizado con un intercambio de regalos, según ha informado el diario 'Cubadebate'.

   Según estas informaciones, Castro esperó al Sumo Pontífice a la entrada de la sede del Consejo de Estado, tras lo que se hicieron una foto oficial frente a las banderas de Cuba y Vaticano.

   Por su parte, el vicepresidente primero de Cuba, Miguel Díaz Canel-Bermúdez, y otros altos cargos cubanos se entrevistaron con el secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolini, y otros miembros de su delegación.

   El encuentro ha tenido lugar poco después de que el Papa se reuniera con el expresidente Fidel Castro en su vivienda, encuentro que duró entre 30 y 40 minutos y que se desarrolló "en un clima muy normal", según el jefe de la oficina de prensa de Vaticano, padre Federico Lombardi.

   Durante la reunión, Francisco y Fidel Castro "hablaron de la problemática mundial de hoy, del medio ambiente", ha indicado Lombardi. El encuentro ha sido "familiar", ha añadido.

   El Sumo Pontífice ha aprovechado su viaje a Cuba para pedir que se sirva a las personas y no a las ideologías durante la homilía que ha pronunciado en la emblemática plaza de la Revolución de La Habana, en la que ha criticado el servicio que se sirve de las personas para su propio beneficio.

   "Hay un servicio que sirve; pero debemos cuidarnos del otro servicio, de la tentación del servicio que se sirve de los demás. Hay una forma de ejercer el servicio que tiene como interés el beneficiar a los míos, en nombre de lo nuestro. Ese servicio siempre deja a los tuyos por fuera, generando una dinámica de exclusión", ha explicado.

   Al finalizar el Papa ha parafraseado una frase atribuida a la Madre Teresa de Calcuta: "Quien no vive para servir, no sirve para vivir". Precisamente, en el frontal del edificio del Museo Nacional de Cuba que sirve como retablo de fondo del altar hay una gran pancarta con imágenes de la Madre Teresa y el lema de la visita: "Misionero de la Misericordia".