SANTO DOMINGO, 20 Abr. (de la enviada especial de EuropaPress, Beatriz Fernández) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, expresó hoy la satisfacción del Gobierno español por la "nueva etapa" de "diálogo y voluntad de encontrar una solución definitiva" que supone la Declaración de Madrid por la que Argentina y Uruguay han acordado volver a reunirse en mayo para seguir tratando la crisis generada por la instalación de una planta de celulosa en el lado uruguayo del río Uruguay, frontera natural entre ambos países.
En declaraciones a los medios de comunicación antes de asistir a la apertura de la XIII Reunión Ministerial entre la UE y el Grupo de Río, Moratinos señaló que la declaración "identifica las áreas donde se va a trabajar a nivel técnico y político" y "expresa la satisfacción por este paso y el resultado de las conversaciones que han tenido lugar en Madrid".
"Para el Gobierno español y para mí mismo es un momento de gran satisfacción el que gracias a los buenos oficios de Su Majestad el Rey, los esfuerzos del embajador (de España ante la ONU, Juan Antonio) Yañez Barnuevo y del Gobierno español hayamos podido ayudar a dos pueblos hermanos, a dos gobiernos tan próximos a España y que se haya recuperado la confianza, que es el primer paso para poder abordar los problemas con una voluntad de solución", manifestó.
El jefe de la diplomacia española esperó que de esta nueva Declaración de Madrid "se pueda concretar en el futuro una solución definitiva a este contencioso", remarcó. Por otra parte, Moratinos indicó que aún "no se ha fijado" el lugar de ese nuevo encuentro de mayo que, subrayó, incorporará "una nueva metodología detrabajo".
Preguntado sobre si España había aportado alguna idea en las conversaciones entre las dos delegaciones, indicó que había facilitado sus "buenos oficios, creación de confianza y atmósfera" que ha ayudado a sellar la Declaración de Madrid y matizó que "corresponde a las partes" presentar propuestas.
El Gobierno español ha insistido en reiteradas ocasiones en que su labor es de buenos oficios o de facilitación, que no mediación, ya que el mediador presenta propuestas y el facilitador se limita a propiciar el diálogo.
Las conversaciones que desde ayer mantuvieron en Madrid las delegaciones argentina y uruguaya suponen el primer diálogo directo en un año que mantienen sobre la llamada 'crisis de las papeleras'. En la Declaración de Madrid se comprometen a reunirse el próximo mayo para abordar cuestiones como una eventual relocalización de la planta y los cortes de puentes y carreteras por parte de asambleístasargentinos.
La reunión será convocada por el embajador español ante la ONU, Juan Antonio Yáñez-Barnuevo, designado por Don Juan Carlos para la facilitación del diálogo en el marco de su labor de buenos oficios.
Además de la relocalización de la planta y los cortes de puentes y carreteras que comunican ambos países, las delegaciones discutirán en mayo una posible ampliación del Estatuto del Río Uruguay ycuestiones relacionadas con la protección ambiental del citado río y la promoción del desarrollo sostenible en sus áreas de influencia.
En la declaración ambas partes agradecen la labor de buenos oficios realizada por el Rey Don Juan Carlos --solicitada por los presidentes argentino, Néstor Kirchner y uruguayo, Tabaré Vázquez-así como su hospitalidad.
Las dos delegaciones estaban encabezadas por el jefe del Gabinete de Ministros argentino (equivalente a un primer ministro), Alberto Fernández y el ministro de Asuntos Exteriores uruguayo, Reinaldo Gargano.
El resto de la delegación argentina estaba formada por el ministro de Exteriores, Jorge Taiana, la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti y otros altos funcionarios y técnicos, mientras que la uruguaya la componen también el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández y el director general del Ministerio de Exteriores, José Luis Cancela, entre otros altos cargos y expertos.