Actualizado 29/07/2009 00:43

Paraguay deroga polémica norma sobre uso pesticidas

ASUNCION (Reuters/EP) - El Gobierno paraguayo dejó sin efecto el martes un decreto sobre el uso de plaguicidas que era rechazado por los principales gremios de productores agropecuarios del país, en un intento por mejorar su conflictiva relación con ese sector.

La medida desactivó una manifestación de los productores programada para el 10 de agosto y que amenazaba con desestabilizar la administración del socialista Fernando Lugo, días antes de cumplir su primer año en el poder.

"El Gobierno está cumpliendo con un compromiso de crear las condiciones para trabajar en esta campaña agrícola", dijo el ministro de Agricultura y Ganadería, Enzo Cardozo, a la radioemisora Primero de Marzo.

El decreto ampliaba los requisitos que se debían cumplir antes de fumigar los campos e incluía medidas consideradas "imposibles" por los productores, como la obligación de anunciar cada fumigación por radio y televisión dos días antes de llevarla a cabo.

"Hay un acuerdo general de abrir un compás de espera y trabajar construyendo acuerdos", dijo Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), que estaba organizando la protesta conocida como "tractorazo".

"Los tractores van a la chacra debido a la derogación", afirmó refiriéndose a la decisión de no seguir adelante con la movilización, que emularía a las llevadas a cabo en Argentina durante el largo enfrentamiento entre productores y Gobierno en el 2008.

No obstante, la derogación desató críticas de organizaciones campesinas que presionaron por la aprobación de la norma, bajo el argumento de que el uso indiscriminado de plaguicidas contamina el ambiente y es sumamente perjudicial para la salud de comunidades vecinas a los sojales.

"Es un retroceso. Los niños mueren por culpa de los agrotóxicos y apenas hacen un simulacro del llamado tractorazo y cambian", dijo el dirigente campesino Luis Aguayo, del Frente Social y Popular, que anunció una protesta contra los plaguicidas en dos semanas.

El decreto derogado había sido adoptado en medio de una caída de cerca de 40 por ciento de la producción del principal rubro de exportación del país, la soja, a causa de una sequía que golpeó a toda la región.

El Banco Central estima que el Producto Interno Bruto se contraerá un 3,8 por ciento en el 2009 debido principalmente al comportamiento de la agricultura, motor de la economía.