ASUNCION, 16 Oct. (Reuters/EP) -
El inminente nombramiento de uno de los nietos del ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner como embajador de Paraguay ante las Naciones Unidas ha desatado una lluvia de críticas de grupos de derechos humanos, que han acusado al Gobierno de reivindicar con su decisión las atrocidades cometidas durante la dictadura.
Alfredo "Goli" Stroessner es hijo de una de las hijas del homónimo dictador y del empresario Humberto Domínguez, pero tomó el apellido de su abuelo. Organizaciones civiles le reprochan que nunca haya reconocido los abusos de un regimen que dejó más de 400 desaparecidos, miles de detenidos y exiliados.
"Esto implica claramente una reivindicación de la dictadura", dijo a Reuters el secretario ejecutivo de la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), Enrique Gauto.
"Se trata de instalar un mensaje de que la dictadura ha sido un Gobierno positivo para el país y de que no ha habido atropellos y no ha habido crímenes de lesa humanidad", agregó.
"NO ESTOY ENVIANDO AL ABUELO" DICE CARTES
El presidente conservador Horacio Cartes dijo el martes que Stroessner, un ex senador oficialista que suele exaltar la figura de su abuelo, le pidió que estudiara su nombramiento.
El mandatario sostuvo que no podía discriminarlo por su parentesco con el hombre que gobernó con mano dura Paraguay durante 35 años hasta su derrocamiento en 1989.
"Estamos hablando de 'Goli', yo no estoy enviando al abuelo", dijo Cartes a periodistas, en unas declaraciones en las que se lo notó molesto e incómodo.
El canciller, Eladio Loizaga, dijo que el nombramiento será analizado los próximos días. La designación de embajadores debe ser refrendada por el Senado, donde el gobernante Partido Colorado carece de mayoría pese a ser la bancada más numerosa.