Actualizado 29/04/2010 22:14

Paraguay.- Paraguay podría permitir al Ejército que use sus armas sin que haya que declarar el estado de excepción


ASUNCIÓN, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Paraguay estudia la posibilidad de modificar la ley de Defensa Nacional y Seguridad Interna para permitir que la Fuerza Pública pueda hacer uso de su armamento sin que sea necesario declarar el estado de excepción, después de que miembros del Ejército Paraguayo del Pueblo (EPP) atacaran a un senador en la frontera con Brasil.

"Se planteó la necesidad de modificar el artículo 56 de la ley 1.337 de Defensa Nacional y Seguridad Interna para que no se tenga que recurrir a una declaración de Estado de excepción", dijo el asesor jurídico de la Presidencia, Emilio Camacho.

El jurista explicó que es necesario modificar el citado artículo porque "establece con claridad la intención de las Fuerzas Armadas, que solamente en estado de excepción pueden utilizar las llamadas armas de guerra y no actuar como hasta hoy, de apoyo a las fuerzas policiales".

Según indicó Camacho, esta reforma legislativa permitirá que las fuerzas de seguridad puedan actuar como corresponda sin que ello suponga una suspensión temporal de derechos fundamentales como la libertad de expresión, de reunión, de tránsito y de manifestación, entre otros, que implica la declaración del estado de excepción en parte del territorio.

La propuesta llega una semana después de que supuestos miembros del grupo paramilitar atentaran el pasado 22 de abril contra el senador Robert Acevedo y asesinaran a un agente de Policía y a tres civiles en una localidad cercana a la frontera con Brasil.

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Entretanto, miembros de las fuerzas de seguridad continúan con las redadas en la ciudad de Pedro Juan Caballero, en el departamento de Amambay (este), para localizar a los sicarios que perpetraron el ataque.

Este jueves se allanaron tres viviendas del barrio de Guaraní donde se sospecha que podrían haberse alojado los paramilitares del EPP y cuyos propietarios serían ciudadanos brasileños.

Durante estas labores, la policía local estuvo respaldada por los militares que se encargaron de proteger a los agentes e inspeccionar la zona mientras se realizaban los allanamientos.