ASUNCIÓN, 27 Oct. (Reuters/EP) -
El partido en la oposición Patria Querida denunció este martes a distintos funcionarios del Gobierno del presidente paraguayo, Fernando Lugo, por una supuesta estafa en la adquisición de unos terrenos. La operación de compra estaba enmarcada en el plan de reforma agraria, prometido por el mandatario durante la campaña electoral.
El Gobierno paraguayo planeó la compra de 22.000 hectáreas al norte del país a un grupo de empresarios brasileños, para acometer la reforma con el reparto de estas tierras entre los campesinos más pobres.
Sin embargo, un diario local publicó que la propiedad iba a ser adquirida por encima de su valor de mercado y que incluía grandes extensiones de bosque, protegidas por una ley contra la deforestación. Tras la publicación de la noticia el Gobierno suspendió la compra.
"Todos los hechos nos indican que estábamos ante una eventual gran estafa al Estado. Hay varias personas que tienen que ser investigadas, incluso el presidente de la República", dijo el diputado Carlos Soler a los periodistas después de presentar la denuncia ante la Fiscalía.
El partido en la oposición Patria Querida denunció por tentativa de estafa, lesión de confianza y delitos contra el ambiente al titular del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y la Tierra (INDERT), a la junta consultiva de la entidad y a los tasadores que evaluaron los terrenos.
Por su parte, INDERT argumentó que no son más que acusaciones de un sector de la sociedad que pretende paralizar la reforma agraria, una de las principales promesas del presidente Lugo durante la campaña electoral, junto a la de combatir la corrupción.
CRÍTICAS A LUGO
La denuncia llega días después de que el principal partido en la oposición, el Partido Colorado, acusara directamente al mandatario de defraudar al Estado por el mismo asunto. Incluso amenazaron al Gobierno con iniciar un juicio político para esclarecer el plan de adquisición de estos terrenos.
En este contexto el vicepresidente, Federico Franco, advirtió que de no ser totalmente aclarado este incidente podría convertirse en un gran obstáculo para la gestión del Ejecutivo. "Este es un tema que la sociedad, los medios de comunicación y los senadores y diputados en particular no van a tolerar", señaló.
Además de estas acusaciones, el presidente paraguayo afronta en estos momentos duras críticas contra el discurso que dirigió a las clases privilegiadas, tras el secuestro del ganadero Fidel Zavala que conmocionó al país y reabrió el debate sobre la inseguridad en las calles.