Actualizado 24/03/2007 00:31

Perú.- El gobierno peruano reitera su confianza en la extradición de Alberto Fujimori desde chile


LIMA, 23 Mar. (EP/AP) -

El gobierno de Perú espera que se produzca la extradición del ex presidente Alberto Fujimori, quien se encuentra en Chile. Así lo aseguró el viernes el ministro de Asuntos Exteriores, José Antonio García Belaúnde.

Fujimori llegó a Chile en noviembre del 2005 procedente de Japón. En Santiago fue detenido durante seis meses a petición de Perú, y ahora está libre, aunque no puede salir de ese país mientras que la justicia chilena no resuelva la petición de extradición que realizó Perú por delitos de corrupción y violación a los derechos humanos.

"Este Gobierno cree que el poder judicial (chileno) extraditará a Fujimori. No me pregunten qué pasaría si no se le extradita", dijo García Belaúnde, al reiterar la confianza del gobierno del presidente Alan García en que la justicia chilena entregue al ex mandatario Fujimori (1999-2000) al poder judicial de Perú.

El ministro desestimó que se pueda contemplar otro escenario que no sea la figura de la extradición. "No tiene sentido hablar de una hipótesis en la cual nosotros no creemos, porque apostamos por la extradición", añadió en declaraciones a la emisora radiofónica CPN.

Advirtió que se podría producir una "reacción justificada" de la población si es que Fujimori no vuelve al país para responder a los cargos en su contra, dos por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, en los que grupos secretos policiales asesinaron a estudiantes y profesores universitarios a los que se tenía por guerrilleros.

Las autoridades de Perú han alertado a Chile ante la posibilidad de que el ex mandatario se fugue o solicite asilo en la embajada de Japón, acogiéndose a su doble nacionalidad, después de que trasladara su residencia en Santiago de Chile al mismo barrio donde se encuentra la delegación diplomática nipona.

Fujimori vivió en Japón desde 2000 hasta 2005 para poder evadir la solicitud de extradición emitida por Perú y que el gobierno japonés negó.