LIMA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ha asegurado este viernes que no quiere que el exmandatario Alberto Fujimori muera en la cárcel, donde cumple una pena de 25 años por violaciones de los Derechos Humanos y corrupción, lo que da pie de nuevo a las especulaciones sobre un próximo indulto.
Kuczynski se ha referido al tema en varias ocasiones en los últimos meses, en un aparente intento por acercarse a la formación que lidera la hija del expresidente, Keiko Fujimori, que controla actualmente el Congreso. Sin embargo, no ha terminado de aclarar cuál es su postura.
"Seguimos con mucho cuidado la salud de la gente interna anciana, sean el señor Alberto Fujimori u otros", ha dicho Kuczynski en declaraciones a la emisora RPP. "Estamos hablando de la salud, no estamos hablando de perdonar a nadie", ha marizado el actual mandatario.
Kuczynski ha afirmado que no quiere que Fujimori se convierta en "un nuevo Leguía" , en relación al antiguo mandatario Augusto Leguia, que fue derrocado y encarcelado en 1930 y murió dos años después en un hospital naval tras una grave enfermedad.
Por el momento no existe un calendario concreto para la entrega del informe médico que determinará si Fujimori merece un indulto humanitario que muchos comienzan ya a dar por hecho. El Ministerio de Justicia renovó recientemente la comisión de gracias presidenciales, lo que desencandenó las críticas de los grupos contrarios a perdonar a Fujimori.
Fujimori, de 79 años de edad y presidente de Perú entre los años 1990 y 2000, ha sido operado cinco veces en la lengua debido a un cáncer y padece depresión e hipertensión. Se encuentra preso desde 2007 por su responsabilidad en las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, en el marco de la guerra sucia entre militares y guerrilleros.