Actualizado 12/06/2009 20:09

Perú.- Policías que participaron en la operación contra los indígenas en Bagua denuncian la falta de equipo adecuado

Los agentes apostados en la Estación nº 6, donde murieron 24 policías, habían llegado a un acuerdo con los manifestantes

LIMA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

Varios de los policías que participaron la semana pasada en la operación para disolver las protestas indígenas en Bagua, en la Amazonía peruana, denunciaron en declaraciones a 'Perú.21' que la actuación estuvo mal planificada y que los efectivos que se enviaron al lugar de los hechos no contaban con el material ni los equipos necesarios para ese tipo de intervención.

Algunos de los agentes heridos, y que han pedido que se reserve su identidad por temor a represalias, pusieron en duda la estrategia aplicada por su comando superior para solucionar el conflicto de Bagua.

"Si hubiera sido un operativo bien planificado, sencillamente se habrían llevado paramédicos, dos helicópteros, como mínimo, y más efectivos. ¿Con menos de 300 policías, íbamos a desbloquear 10 kilómetros de carretera?", se preguntó uno de los policías.

Otro de ellos indicó que aunque los agentes pensaban que estaban preparados "para desalojo y control de multitudes" provistos de "casco, escudo, chaleco antimotín, vara de goma, el AKM reglamentario y gas" lacrimógeno, lo cierto es que "no estábamos preparados para esta operación, que era especial". Según él, para esta intervención habría hecho falta otro tipo de material que inclueya chaleco antibalas y ocho cartuchos de balas, pero sólo llevaban cuatro.

Otro de sus compañeros insiste en que "nos dijeron que era un desalojo, pero era un desbloqueo, un operativo especial, y para hacer un desbloqueo se requiere de un plan, una orden de operaciones, un plan de seguridad, con Inteligencia previa".

Sin embargo, según todos ellos, los sucesos que siguieron, en los que murieron al menos 33 personas entre agentes e indígenas, se produjeron por la falta de datos por parte de los servicios de inteligencia policiales. Asimismo, denunciaron que los oficiales no escucharon las informaciones que dieron los agentes que llevaban días en la zona y que advirtieron de la presencia de minas y de cócteles molotov.

ACUERDO ENTRE POLICÍAS E INDÍGENAS

Por su parte, el diario 'La República' también informa hoy de errores en la operación policial. Según policías que estuvieron presentes en la Curva del Diablo y en la Estación Nº 6 de Petroperú en Bagua, donde los indígenas mataron a 24 efectivos, el comando encabezado por el jefe de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes), general Luis Muguruza Delgado, adoptó medidas erróneas que contribuyeron a poner a los policías a merced de los manifestantes.

De acuerdo con este diario, los agentes de la Estación Nº 6 de Petroperú habían llegado a un acuerdo de no agresión con los indígenas, pero el pacto se rompió cuando otro contingente de efectivos, por mandato del general Muguruza y con conocimiento del Ministerio del Interior, emprendió una operación de desalojo de la carretera que estaba tomada por los manifestantes.

Según el rotativo, el acuerdo había sido firmado por un capitán y respetado por su sucesor al frente de los agentes en este lugar. En declaraciones a 'La República', el general Luis Muguruza dijo que no estaba enterado del pacto de no agresión con los indígenas. "No sé nada, yo recién llegué a Bagua el día cuatro de junio", dijo y cortó el teléfono.

Sin embargo, según las fuentes consultadas por el diario, tanto Muguruza como el director de la Policía Nacional Peruana (PNP), general José Sánchez Farfán, y la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, estaban al tanto del acuerdo con los indígenas.

Según relataron dos de los agentes que sobrevivieron a la matanza en la Estación Nº 6, cuando los indígenas se dieron cuenta de que se había roto el acuerdo de paz, procedieron a quitarles sus armas y los maniataron, y posteriormente, al enterarse de que tres indígenas habían muerto en la Curva del Diablo, decidieron vengarse ajusticiando a los policías.

"Nosotros no entregamos nuestras armas a los indígenas. Ellos nos despojaron de nuestro armamento cuando por radio se enteraron de lo que estaba pasando en la Curva del Diablo. Se vengaron con nosotros porque se sintieron traicionados", declaró el suboficial Óscar Mancilla, precisando que "no ofrecimos resistencia porque las bajas indígenas habrían sido muchas".