Actualizado 23/04/2015 15:49

Petrobras pierde más de 2.000 millones de dólares por la corrupción

A policeman stands in front of the Petrobras headquarters during a protest in Ri
Foto: SERGIO MORAES / REUTERS

   RÍO DE JANEIRO, 22 (Notimérica)

   El escándalo de corrupción en Petrobras ha provocado en la compañía un agujero de más de 2.000 millones de dólares (6.200 millones de reales), un desfalco que se ha colocado en el cómputo de 2014 y ha provocado que la empresa cierre el ejercicio con más de 7.100 millones de dólares en pérdidas totales, frente a los 7.800 millones de dólares de beneficios que tuvo en 2013.

   Así lo ha detallado este miércoles el presidente de Petrobras, Aldemir Bendine, al hacer públicos unos resultados sobre los que había mucha expectación, después de semanas de retraso y de que la auditora PriceWaterhouseCoopers se negara en su día a dar el visto bueno a las cuentas por las dudas sobre la dimensión de los desvíos de la trama corrupta.

   Ante las dificultades para calcular el daño total que ha hecho el esquema forjado en los últimos años la compañía ha optado por tomar como válido el 3 por ciento sobre cada contrato que se firmaba con las empresas proveedoras, cifra que citaban los principales delatores del caso.

   En base a esas declaraciones también se concluyó que el periodo en el que actuó el esquema de pagos indebidos fue de 2004 a abril de 2012, y que el 55 por ciento de las pérdidas por corrupción se produjeron en el área de Abastecimiento, la que controlaba el exdirector Paulo Roberto Costa, uno de los principales cabecillas de la trama.

   Según el balance de Petrobras este área provocó 1.100 millones de dólares de pérdidas; la de Exploración y Producción 655 millones --el equivalente al 32 por cient de las pérdidas--, y el resto se lo reparten las áreas de Distribución, Internacional y Corporativo.

   Costa, a través de la dirección de Abastecimiento, fue uno de los principales causantes del agujero, gracias, principalmente a dos proyectos muy ambiciosos; la refinería de Abreu e Lima, en Permabuco, y el Complejo Petroquímico de Río de Janeiro (Comperj).

   Los desvíos en las obras de construcción, los problemas a la hora de acabar las obras y el perjuicio que ha provocado que los trabajos se hayan parado definitivamente por las investigaciones judiciales han hecho que estos activos de Petrobras, que antes eran sus joyas de la corona, le hayan costado ahora casi 10.000 millones de dólares.

AFECTADA TAMBIÉN POR EL PRECIO DEL CRUDO

   Además, la compañía también se ha visto afectada por la caída del precio internacional del petróleo, que ha provocado 3.000 millones de dólares de pérdidas en la explotación y producción de petróleo y gas natural, así como la reducción de la demanda del sector petroquímico, otros mil millones menos.

   Aún así, y a pesar de todos los problemas, la facturación de Petrobras creció un 10,6 por ciento el año pasado llegando a los 112.000 millones de dólares, algo que ha logrado básicamente reajustando al alza los precios de los combustibles que vende en Brasil por encima de los precios internacionales.

   Sobre las perspectivas para 2015 Petrobras prevé invertir 29.000 millones de dólares, un 17 por ciento menos que el año pasado, y para 2016 seguirá la política de ajustes y contención; las inversiones caerán un 37 por ciento en relación a lo que estaba previsto en un principio y se quedarán en 25.000 millones de dólares. Petrobras espera captar en lo que queda de 2015 unos 13.000 millones de dólares para llegar a finales de año con 20.000 millones en la caja.

UN RESPIRO PARA LA COMPAÑÍA

   Al presentar los resultados Petrobras se ha librado de la amenaza de un pago anticipado obligatorio de hasta 110.000 millones de dólares en deuda --lo equivalente al 5 por ciento del PIB brasileño--, ya que si no lo hacía antes del final del mes de abril tendría 60 días para corregir el riesgo de 'default'.

   "Estamos dando un paso fundamental en dirección al pleno rescate de la credibilidad de Petrobras junto a sus accionistas, proveedores, al mercado y a la sociedad", ha dicho el presidente de la compañía, Aldemir Bendine, que ha enmarcado todo su discurso en un tono de confianza: "Petrobras no va a parar", ha asegurado.

   Así pues, la compañía confía en que el ejercicio de transparencia de resultados. Moody's dijo esta semana que el mero hecho de publicar el informe ya sería positivo y podría elevar su 'rating' --en enero bajó la nota a la compañía-- y el ministro de Economía y Hacienda, Joaquim Levy, también aseguró recientemente que estos resultados serían el principio de la "reconstrucción" de Petrobras.

CÁRCEL PARA LOS DELATORES

   Sin embargo, de forma paralela al día a día de la compañía transcurre el proceso judicial de la Operación Lava Jato; este mismo miércoles han sido condenados a prisión el ex director de Abastecimiento, Paulo Roberto Costa, y el cambista Alberto Yousseff, acusados de desviar hasta seis millones de dólares de las obras de la refinería de Abreu e Lima, en Pernambuco.

   Costa ha sido condenado a siete años y seis meses, y Yousseff, a nueve años y dos meses, pero ambos verán reducida su condena, porque al ser los principales delatores del caso tendrán beneficios penitenciarios.

   Desde que estallara la Operación Lava Jato hace ya más de un año Brasil asiste a un goteo de informaciones que han implicado a prácticamente todos los partidos del arco parlamentario, pero que está minando especialmente la credibilidad del Partido de los Trabajadores (PT).

   Su tesorero, João Vaccari Neto, fue detenido la semana pasada acusado de haber financiado el partido con dinero sucio de Petrobras durante diez años, y la presidenta Dilma Rousseff se ha visto salpicada indirectamente porque en los años en que se forjó la trama ella presidía el Consejo de Administración de la compañía.