MADRID, 19 Dic. (Notimérica) -
'Globesity'. Este es el término acuñado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para referirse a una problemática que afecta hoy en día a 500 millones de personas en todo el mundo: la obesidad.
Este trastorno, que podría agravarse en el futuro, dado que actualmente 1.600 millones de individuos padecen sobrepeso, ha sido el centro del simposio internacional organizado por la Fundación General del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Fundación Ramón Areces, celebrada en Madrid (España), tal y como informa el blog de Telefónica 'Think big'.
Durante el evento, los asistentes se plantearon las cinco preguntas clave para entender este problema y buscar soluciones reales.
1. ¿HAY GENES DE LA OBESIDAD?
La respuesta es sí. De hecho, según la directora del programa de metabolismo y genética de la obesidad del Instituto de Medicina Personalizada Charles R. Bronfan, Ruth Loos, entre el 40 y el 70 por ciento de los casos tienen un componente genético sobre obesidad.
En este sentido, la comunidad científica ha podido describir más de 200 genes asociados a esta patología.
2. ¿MISMOS GENES, DISTINTOS CUERPOS?
La posesión de los mencionados genes no tiene por qué tener como resultado la obesidad. En los últimos años, los estudios sobre epigenética han revelado la importancia que tienen los factores ambientales sobre este problema de salud.
Asimismo, el nivel socioeconómico y educativo condicionan que mantengamos o no un estilo de vida saludable, una de las principales armas contra este trastorno.
3. ¿LA GRASA INFLUYE?
La grasa sí que influye en la aparición de la obesidad. Sin embargo, el factor determinante no es la grasa en sí, sino su localización, ya que dependiendo de la zona del cuerpo en la que se ubique es más o menos dañina.
4. ¿QUÉ PAPEL TIENE EL CEREBRO?
"La obesidad está en el cerebro", han señalado expertos consultados por 'Think big'. Mediante esta afirmación, los especialistas comparan la obesidad con la adicción al tabaco o al alcohol, con la diferencia de que uno puede dejar de fumar o de beber pero no de comer.
Sin embargo, la ciencia espera encontrar una solución a este punto con el descubrimiento de los mecanismos cerebrales que condicionan que comamos más o menos, y así poder controlar las ansias y el apetito de manera directa y eficaz.
5. ¿SE PUEDE PREDECIR?
De acuerdo con las conclusiones extraídas del evento celebrado en Madrid, hoy en día sólo es posible predecir entre el cinco y el 20 por ciento de los casos debido a la complejidad de este trastorno.
Ante la duda, la mejor prevención es llevar una dieta saludable y hacer ejercicio físico a diario con el fin de controlar la báscula y, con ella, la aparición de la obesidad.