Actualizado 07/08/2009 00:50

Presidenta argentina, ante examen en Congreso por impuesto agro

Por Kevin Gray

BUENOS AIRES (Reuters/EP) - La presidenta argentina, Cristina Fernández, enfrenta su primer desafío desde que perdió el control del Congreso en junio pasado, ante una oposición que busca recortar el poder del Gobierno para fijar tasas a las exportaciones agrarias, una fuente crucial de ingresos.

La instancia legislativa pondrá en evidencia el apoyo que tiene Fernández en el Parlamento, donde perdió la mayoría en los comicios del 28 de junio. El nuevo Congreso entrará en funciones en diciembre, pero la derrota electoral ya debilitó al oficialismo.

En la próxima semana, la Cámara Baja abrirá el debate sobre si renovarán los poderes delegados que hasta ahora permitieron a la presidenta modificar impuestos sin la aprobación del Congreso de Argentina, uno de los mayores exportadores mundiales de alimentos.

La cuestión es políticamente sensible. El impuesto a las exportaciones de soja, principal fuente de ingresos de Argentina, están en el centro de la prolongada pelea entre el Gobierno y los productores agropecuarios, que el año pasado tuvieron en jaque a la administración central con agresivas huelgas y protestas.

Muchos políticos opositores apoyan los reclamos de los productores -que arguyen que las tasas están ahogando la producción- de bajar los impuestos a las ventas de soja y de otros cultivos como el trigo y el maíz.

Con escasas señales de acuerdo entre el Gobierno y los productores, la oposición quiere que el Congreso recupere su capacidad para establecer impuestos a las exportaciones, mientras que los dirigentes agropecuarios esperan que el debate parlamentario derive en una reducción impositiva.

"Esta será una prueba de la fortaleza de Fernández", señaló el analista político y económico Freddy Thomsen.

"Hay una oposición envalentonada tras las elecciones que se embandera en causas populares. Pero perder el control sobre los impuestos a las exportaciones podría ser un gran problema para el Gobierno, que está enfrentando dificultades fiscales", añadió.

LAGUNA FINANCIERA

El Gobierno argentino debe pagar 13.000 millones de dólares de deuda el año próximo y algunos analistas señalan que tendría una laguna financiera de 5.500 millones de dólares en el 2010.

Se espera que las exportaciones de soja generen una recaudación de alrededor de 5.000 millones de dólares para las arcas de Agentina, el tercer exportador mundial de la oleaginosa y el mayor proveedor global de sus productos derivados.

La economía del país se está desacelerando desde fines del año pasado, lo que redujo el superávit presupuestario primario, en el que se apoya fuertemente para cumplir con sus obligaciones de deuda.

Siete años después de una fuerte crisis que derivó en la cesación de pagos, Argentina aún está marginada de los mercados globales de crédito debido a una disputa con los tenedores de bonos que rechazaron el canje de deuda en el 2005.

Adrián Pérez, legislador de la opositora Coalición Cívica, dijo que su partido quiere quitar a Fernández el poder de fijar los impuestos a las exportaciones, que forman parte de un conjunto de facultades extraordinarias que tienen los mandatarios de Argentina, pero que tienen que ser periódicamente renovadas en el Congreso.

"Nos parece que es hora que el Parlamento recupere sus facultades", aseguró Pérez.

Algunos analistas creen que la oposición, en última instancia, podría intentar un acuerdo con el oficialismo para permitirle a Fernández mantener la capacidad de imponer impuestos, pero de forma limitada.

La tasa a la soja es actualmente del 35 por ciento y los productores agropecuarios quieren reducirla en 10 puntos porcentuales.

El Gobierno, que necesita del voto de legisladores no oficialistas, también está buscando un consenso, pero insiste en que cualquier acuerdo debería cerrarse en el marco de la discusión del presupuesto nacional, el mes próximo.

"Discutirlo sin analizar el impacto fiscal que tiene (la baja del impuesto) es una irresponsabilidad", afirmó Agustín Rossi, jefe del bloque oficialista de diputados.