Actualizado 19/11/2006 23:15

Puerto Rico.- América Latina propone impulsar la independencia de Puerto Rico


PANAMÁ, 19 Nov. (EP/AP) -

Representantes políticos latinoamericanos se reunieron hoy en Panamá para constituir un comité de trabajo permanente para impulsar la independencia de Puerto Rico al que calificaron de "ejercicio libertador" del siglo XXI.

La Declaración de Panamá es uno de los acuerdos alcanzados en el marco del Congreso Latinoamericano y Caribeño por la Independencia de Puerto Rico, realizado en la capital panameña y auspiciado por la Internacional Socialista (IS) y la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL).

"Ha llegado la hora para que América Latina se ponga al día y busque una solución de manera concertada y comprometida al tema de Puerto Rico", aseguró el secretario general de la IS, Luis Ayala.

"No es un reto que sólo convoca a los partidos políticos, sino que convoca a los gobiernos y a los sectores de la sociedad civil", añadió Ayala, uno de los miembros del comité que habló ante la prensa al final del evento.

El secretario de asuntos internacionales del Ministerio de Asuntos Exteriores panameño e integrante del comité, Nils Castro, dijo que "hay que trabajar para que la independencia de Puerto Rico deje de ser un sueño, una retórica".

Planteó que el estatus de Puerto Rico "se ha convertido en un problema para la isla, Estados Unidos y las naciones latinoamericanas". Argumentó que con la actual figura de Estado Libre Asociado, Puerto Rico "no puede formar parte de los procesos de integración económica y comercial de la región".

En la isla, sin embargo, el debate está en mantener el actual status o buscar la anexión como estado de los Estados Unidos, algo que según los participantes en el Congreso no resultaría nada fácil.

El Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), que logró la convocatoria a este congreso, admitió que su causa en el interior de la isla ha de enfrentarse a importantes escollos.

En un referendo realizado en la isla en 1998, apenas el 2,5% avaló la independencia, mientras que un 1% se expresó a favor del Estado Libre Asociado y un 46,5% respaldó el anexionismo. El 50,3% no favoreció ninguno de los anteriores porque no estaba de acuerdo con la definición de estado libre asociado.

El Congreso quiso dejar claro que serán los propios puertorriqueños los que decidan su futuro, y que lo que se acordó en Panamá fue comprometer a América Latina y al Caribe para que sirva como interlocutora e impulse desde la política la demanda de los independentistas isleños.

Para los participantes, la independencia no debería verse como una utopía. Raúl Alfonsín, presidente argentino entre 1983 y 1989, consideró que "estamos en la última etapa de esta larga lucha que ha llevado adelante el PIP". El comandante sandinista nicaragüense Tomás Borge también valoró que estamos "en los umbrales de la victoria. Me moriré tranquilo cuando ello ocurra".

El presidente de la Asamblea del Poder Popular de Cuba, Ricardo Alarcón, consideró por su parte que no cree que Estados Unidos esté dispuesto a permitir la anexión y que la alternativa debe ser la independencia.

"Imaginar que vayan a incorporar a una nación latina completa es sencillamente inconcebible", declaró. "El modelo de Estado Libre Asociado, colonial como acaba de reconocer la Casa Blanca, también es inviable", continuó. "La alternativa real (y) razonable para los propios Estados Unidos es la independencia".

Borge y Alarcón también serán miembros del comité, así como el histórico dirigente de la izquierda mexicana Cuauhtémoc Cárdenas y el ex candidato liberal a la presidencia colombiana Horacio Serpa, entre otros.

Puerto Rico, un país de 3,9 millones de habitantes, se encuentra bajo administración estadounidense desde su independencia de España, en 1898, y sus habitantes tienen ciudadanía estadounidense desde el 1917.