Por Jason Lange
MEXICO DF (Reuters/EP) - México podría enfrentar otra década perdida, en medio de trabas políticas que impiden la aplicación de reformas económicas que crearían empleos y evitarían que los trabajadores emigren a Estados Unidos.
El pobre resultado para el partido del presidente Felipe Calderón en los comicios legislativos de este mes y la profunda recesión harán que probablemente los congresistas rechacen reformas fiscales de peso este año.
Pese a años de discursos sobre la necesidad de aumentar la inversión en el sector energético, el combate a los monopolios y la mejoras a las maltrechas carreteras y escuelas del país, la economía de México es una de las más estancadas de Latinoamérica.
El crecimiento económico probablemente tenga un crecimiento promedio de 1.9 por ciento anual en esta década, muy por debajo del 3.8 por ciento de Chile y el 3.2 por ciento de Brasil, según pronósticos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Somos los mas atrasados de la sala", dijo el senador Gustavo Madero, quien ha sido una figura clave en las negociaciones para las reformas económicas en el Congreso desde 2003. El legislador del gobernante Partido Acción Nacional (PAN) admitió que este no será un año de grandes reformas.
Se espera que la economía de México presente este año su mayor declive desde 1932 a causa de la crisis global, no obstante durante años su desempeño ha sido inferior al de Chile y Brasil.
En una tabla sobre la escala de competitividad de las economías del mundo, la mexicana cayó al puesto 60 desde el 52, según el Foro Económico Mundial. Chile se ubica en el 28.
México se convirtió en un fuerte exportador tras la entrada en vigor en 1994 del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado con Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, su fuerte dependencia de las exportaciones hace al país más vulnerable a las recesiones en su vecino del norte.
Chile también abrazó el libre comercio, pero además hace un mejor trabajo en recaudación fiscal y en promoción de inversiones. Brasil tiene una mayor recaudación y ha desarrollado tecnológicamente su industria petrolera.
BAJO DESEMPEÑO
El débil crecimiento de México evita que las empresas creen empleos suficientes para mantener el ritmo del aumento de la población, lo que lleva a miles de mexicanos a probar su suerte emigrando Estados Unidos.
Además mantiene a gran parte de la población en la pobreza. Una de cada cinco personas batalla para comer lo mínimo suficiente, y la mitad de los adultos del país no estudió más allá de la primaria.
Alejandro Ibarra, de 21 años, vende gorras de béisbol sobre una manta frente un edificio gubernamental en la Ciudad de México. Tras la secundaria dejó la escuela para comenzar a trabajar para ayudar a su familia. Algunos de sus primos trabajan en Estados Unidos.
"Quiero ir a la 'prepa' (escuela preparatoria) poder conseguir un mejor empleo, pero no sé cuándo podría", dijo Ibarra, momentos antes de tomar su manta y salir corriendo ante la llegada de la policía que ahuyenta a los vendedores ambulantes.
La economía informal en la que Ibarra trabaja también es un gran elemento que limita el desarrollo del país. El Gobierno sólo recauda una décima parte del producto interno bruto a causa de la evasión, nivel similar al de Haití, pero la bonanza de los ingresos petroleros de las décadas recientes ha permitido al Congreso evitar el problema fiscal.
Sin embargo, la producción petrolera ha venido en declive desde 2004, y los expertos y legisladores de todos los partidos están de acuerdo en que se debe elevar la recaudación de impuestos.
De no lograrse las reformas necesarias, las agencias calificadoras podrían recortar sus recomendaciones para la deuda de México este año.
"No es que nos haga falta identificar los problemas. El problema es que no tenemos la capacidad de ponernos de acuerdo. No hay acciones", dijo Mauricio González, economista de LatinSource.
Ningún partido ha tenido mayoría absoluta en el Congreso desde mediados de la década de 1990. En los comicios de inicios de mes, el PAN cayó al segundo lugar en la Cámara de Diputados, lo que le complica su habilidad para impulsar reformas.