NOTA DE LOS EDITORES: La cobertura de Reuters ahora está sujeta a una orden de Irán que prohíbe a los periodistas de medios extranjeros salir de sus oficinas para reportear, tomar fotos o videos en Teherán.
Por Dominic Evans y Fredrik Dahl
TEHERAN (Reuters/EP) - El derrotado candidato presidencial iraní Mirhossein Mousavi convocó a un día de duelo por los muertos que dejó la violencia tras la disputada elección de la semana pasada, mientras decenas de miles de personas salieron el miércoles a manifestarse por quinto día consecutivo.
Simpatizantes del derrotado candidato reformista Mousavi desafiaron a las autoridades de Teherán para protestar contra la victoria del presidente de línea dura Mahmoud Ahmadinejad en las elecciones del viernes, que ha llevado a los mayores disturbios en el país desde la Revolución Islámica de 1979.
Las manifestaciones y sangrientos enfrentamientos en las calles de Teherán dejaron al menos siete muertos el lunes, de acuerdo a la prensa estatal, al tiempo que las protestas se han extendido a otras ciudades.
"Pido a la gente que exprese su solidaridad con las familias (...) juntándose en mezquitas o participando en manifestaciones pacíficas", solicitó Mousavi en su página de internet, añadiendo que él también se iba a sumar al día de duelo previsto para el jueves.
La violencia de los últimos cuatro días, los arrestos y las restricciones a los medios volcaron la atención internacional al quinto mayor exportador de petróleo, que está enfrentado con Occidente por su programa nuclear.
Tras el mensaje de Mousavi, sus simpatizantes acudieron a la Plaza Haft-e Tir de Teherán, ignorando una advertencia del Ministerio del Interior, dijeron testigos. La mayoría estaban vestidos de negro con cintas verdes, el color de la campaña del líder reformista.
Las masivas protestas son un desafío directo a las autoridades que han mantenido un fuerte control de la disidencia desde el derrocamiento del sha, apoyado por Estados Unidos, en 1979 luego de meses de manifestaciones.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien ha buscado una nueva relación con Irán y ha pedido a sus líderes que "aflojen el puño", dijo que las manifestaciones muestran que "el pueblo iraní no está convencido de la legitimidad de las elecciones".
Las principales potencias occidentales han cuestionado la transparencia del resultado.
La discordia dentro del sistema iraní nunca había sido tan pública.
Mousavi cuenta con el respaldo de figuras como los ex presidentes Akbar Hashemi Rafsanjani y Mohammad Khatami, quienes están preocupados por la agresiva política exterior de Ahmadinejad y las populistas medidas económicas que están definiendo el futuro de Irán.
La televisión estatal dijo que los "principales agentes" en los disturbios posteriores a la elección fueron arrestados con armas y explosivos.
El Líder Supremo, ayatolá Ali Khamenei, dirigirá los rezos del viernes y se espera que repita un llamamiento a la calma.
La máxima autoridad del país ya ha pedido a los iraníes que apoyen a Ahmadinejad, pero los partidarios de Mousavi siguen saliendo a las calles para protestar por la elección.
MAS ARRESTOS, PENA DE MUERTE
Las fuerzas de seguridad arrestaron a un activista prorreformista y a un editor el miércoles, mientras que un fiscal provincial advirtió que aquellos que provoquen disturbios podrían enfrentar la pena de muerte.
Una fuente reformista dijo que Saeed Laylaz, editor del diario financiero Sarmayeh, y el activista Mohammadreza Jalaiepour fueron arrestados el miércoles a la mañana.
Khamenei, quien se ha mostrado partidario de Ahmadinejad, dijo que en algunas urnas los votos serían contados nuevamente.
Pero el principal organismo legislativo del país, el Consejo de Guardianes, descartó la demanda de los reformistas de anular la elección.
El Ministerio de Relaciones Exteriores citó al embajador suizo, que representa los intereses estadounidenses en Teherán, para protestar contra las "intervencionistas" declaraciones de Estados Unidos sobre las elecciones del 12 de junio.
Obama dijo al canal estadounidense de televisión CNBC que parecía haber pocas diferencias en materia política entre Ahmadinejad y Mousavi.
"De todas formas vamos a estar tratando con un régimen iraní que históricamente ha sido hostil con Estados Unidos", explicó.