Por Matt Robinson
TIFLIS (Reuters/EP) - Osetia del Sur acusó a fuerzas georgianas de disparar morteros el sábado hacia el territorio rebelde y Rusia advirtió a Tiflis de que se reserva el derecho de usar la fuerza para defender a los civiles, un año después de una guerra que duró cinco días.
Georgia negó que hubiese habido algún tiroteo y, en medio de una creciente tensión de cara al aniversario de la guerra del 7 de agosto, dijo que la declaración rusa sugiere "propósitos agresivos". Analistas han advertido del riesgo de que estallen escaramuzas por nuevas hostilidades.
Osetia del Sur dijo que se dispararon dos rondas de mortero hacia un puesto militar de observación desde la localidad de Ditsi, del lado georgiano de la frontera de facto, que está a unos pocos cientos de metros del límite sur de la capital rebelde de Tskhinvali.
Osetia del Sur realizó el jueves una acusación similar, y un reportero de Reuters escuchó dos fuertes estallidos desde Tskhinvali, pero no logró identificar la causa.
Supervisores del cese del fuego de la Unión Europea dijeron que no han visto evidencia de ataques en Tskhinvali o sus alrededores.
Sin embargo, Rusia advirtió a Georgia por "nuevos actos de provocación".
"El Ministerio de Defensa ruso se reserva el derecho de usar toda su fuerza y medios disponibles para defender a los ciudadanos de la república de Osetia del Sur y a los soldados rusos", dijo el Ministerio en un comunicado, reportó la agencia de noticias Interfax.
El Ministerio del Interior georgiano dijo que no ha habido fuego desde ningún lado de la frontera. El comunicado ruso "claramente muestra un propósito muy agresivo", dijo el portavoz del ministerio, Shota Utiashvili.