SAN SALVADOR, 21 Jul. (EP/AP) -
El Gobierno de El Salvador afirmó el viernes que pedirá al Vaticano la beatificación del arzobispo Óscar Arnulfo Romero, asesinado en 1980, pero no aceptará su responsabilidad en la muerte del religioso.
El viceministro de Seguridad y Justicia, Astor Escalante, anunció la decisión el miércoles durante una reunión con seguidores del arzobispo en la oficina de la Comisión Interamericana para los Derechos Humanos, en Washington. El viceministro de Asuntos Exteriores, Eduardo Calix, confirmó el viernes la decisión.
Escalante aseguró que "el Estado (del El Salvador) no puede aceptar la responsabilidad" por el asesinato del religioso porque "hay una persona concreta que es la responsable", la cual "fue juzgada".
Un tribunal salvadoreño declaró a Álvaro Saravia culpable de disparar mortalmente a Romero. Salió de prisión gracias a una amnistía en 1993. Romero fue asesinado en 1980, tras instar al Ejército a parar a los escuadrones de la muerte que mataron a miles de supuestos guerrilleros y opositores de izquierda.