Publicado 11/11/2015 21:13

Scioli y Macri intercambian acusaciones de cara a la segunda vuelta electoral

 El Oficialista Daniel Scioli Y El Opositor Mauricio Macri
REUTERS

   BUENOS AIRES, 11 Nov. (Notimex/Notimérica) -

   Las campañas presidenciales de Argentina para la segunda vuelta de los comicios, que se celebrará el próximo 22 de noviembre, han quedado sumidas en un intercambio de acusaciones y denuncias entre los candidatos Daniel Scioli y Mauricio Macri.

   Según la última encuesta, elaborada por la firma Poliarquía Consultores para el periódico argentino 'La Nación', el candidato a la Presidencia argentina por el bloque opositor Cambiemos, Macri, aventaja en más de ocho puntos al oficialista, Scioli.

Los equipos de campaña, los medios afines a cada uno de los candidatos y sus militantes o simpatizantes replican sus respectivos temores sobre lo que puede ocurrir si gana el oficialismo o la oposición.

   Las principales denuncias en contra de Macri, candidato de la opositora alianza Cambiemos, se basan en su falta de solidez y coherencia ideológica, ya que ahora respalda medidas del Gobierno que siempre criticó, como las ayudas económicas a los que menos recursos poseen, pero que son populares entre la población.

   Mientras tanto, Scioli arrastra con las consecuencias de los múltiples escándalos de corrupción de los Gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, la manipulación de las estadísticas oficiales, el ocultamiento de la inflación y la pobreza, y el estilo agresivo que caracterizó el oficialismo y que agotó a un sector de la sociedad.

   Los detractores de Macri recuerdan que su partido votó en contra de la reestatización de Aerolíneas Argentinas, las pensiones y jubilaciones y la petrolera YPF, del matrimonio entre personas del mismo sexo, la ley de identidad de género para transexuales, travestis y transgénero y del voto opcional para jóvenes de 16 a 18 años.

   Además, se abstuvo en la discusión de la Ley de Fertilización Asistida que ha permitido que cientos de parejas tengan hijos, y se ausentó del debate legislativo en el que se aprobó la ley contra la trata de personas.

   Desde la campaña de Scioli, anticipan que estos y otros derechos adquiridos están en riesgo si gana Macri, acusación que el opositor rechaza al asegurar que no modificará las políticas "que sí funcionan".

   Colectivos universitarios, de la ciencia y tecnología, el ámbito editorial y el arte en general han manifestado su temor a que una probable victoria de Macri implique un retroceso en las políticas culturales, de Derechos Humanos y sociales que avanzaron en los últimos años.

   Los temores están fundados en el pasado del candidato, el millonario empresario que siempre aplaudió las políticas neoliberales de los años 90 que empobrecieron al país y que sin rubor alguno criticó la redistribución de la riqueza.

El problema es que Scioli también arrastra un perfil similar, ya que nació políticamente al amparo de Carlos Menem, el ex presidente que durante una década impuso aquí el neoliberalismo, lo que es recordado por los simpatizantes macristas.

   Con el apoyo de la prensa opositora al kirchnerismo, Macri denunció que las críticas en su contra forman parte de una "campaña del miedo" impulsada por el Gobierno.

   Sin embargo, el candidato opositor tiene en sus filas a Elisa Carrió, una dirigente que fue tres veces candidata presidencial y que maneja un discurso agresivo, plagado de presagios sobre muertes y violencia que opacan cualquier otro vaticinio que pueda hacer el oficialismo.