Actualizado 21/02/2015 20:12

Silencio de los gobiernos latinoamericanos ante la detención de Ledezma en Venezuela

Detención de Ledezma Caracas
Foto: REUTERS

CARACAS, 21 Feb. (Notimérica) -

   Tras la controvertida detención del alcalde de Caracas en Venezuela, Antonio Ledezma, que fue arrestado el jueves por supuestamente "organizar y ejecutar actos violentos contra el Gobierno de Nicolás Maduro, en América Latina sólo se han pronunciado al respecto los gobiernos de Cuba, Colombia, Chile y Brasil.

   Mientras el Gobierno venezolano y los 'chavistas' denuncian que el alcalde de Caracas forma parte de una trama en la que varios opositores tratarían de derribar a Maduro del poder mediante un golpe de Estado, los críticos al Ejecutivo denuncian una persecución política del presidente venezolano hacia aquellos que buscan un cambio en un país asediado por la falta de alimentos, la inseguridad y la inflación.

   Ledezma es uno de los líderes opositores continuamente señalados por el Gobierno como 'cerebros' de planes para derribar al Ejecutivo. El alcalde, que pertenece a Alianza Bravo Pueblo, apoyó junto al encarcelado Leopoldo López y a la exdiputada María Corina Machado las protestas contra el Gobierno que tuvieron lugar en febrero de 2014 y que se saldaron con 43 muertos y más de 3.500 detenidos.

   Los tres opositores han estado hasta el momento abogando por una "salida" de Maduro de la presidencia y este mes de enero Ledezma firmó un comunicado conjunto con López y Machado, en el que los tres aseveraban que si "en 2014 la salida era urgente" en 2015 era "impostergable".

REACCIONES DE LOS GOBIERNOS DE AMÉRICA LATINA

   Ante la dificultad de la situación, sólo se han pronunciado o han emitido algún comentario al respecto los gobiernos de Cuba, Colombia, Chile y Brasil.

   Como era de esperar, en un gesto de fuerte apoyo al Ejecutivo venezolano, el Ministerio de Exteriores de Cuba ha mostrado su "apoyo" y "solidaridad" con el Gobierno de Venezuela y con Maduro, frente a lo que ha calificado de "reciente intento de golpe de Estado, planes de atentado y conspiraciones posteriormente denunciadas".

   La Habana ha incidido en que el tipo de acciones violentas que tienen lugar en Venezuela "violan la soberanía, la independencia y la libre determinación del pueblo venezolano". Asimismo, ha asegurado que los funcionarios cubanos presentes en Venezuela "continuarán cumpliendo con su deber bajo cualquier circunstancia".

   Por otro lado, y en un tono más precavido, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se ha referido a la detención de Ledezma y ha indicado que espera que "se respeten todas las garantías para un debido proceso".

   En una declaración oficial, Santos ha pedido así al Gobierno venezolano que dé garantías al alcalde caraqueño que fue detenido este jueves por agentes del Servicio de Inteligencia de Venezuela (SEBIN),  por su supuesta implicación en un intento de golpe de Estado.

   Ante esta situación, el presidente colombiano sí que se encuentra consultando opiniones con otros ocho compañeros de la región, según ha indicado, "para ayudar a que los venezolanos encuentren una solución que a todos convenga".

   Por su parte, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, este viernes ha recibido a un grupo de embajadores entre los que se encontraba la representante de Venezuela. Preguntada por si no habría ningún gesto que expresara malestar por la detención de Ledezma, la mandataria ha dicho que no puede basarse en "cuestiones internas" del país para definir la relación con los embajadores.

   También con precaución, el portavoz de La Moneda en Chile, Álvaro Elizalde ha evitado juzgar la detención de Ledezma y ha indicado que "existe preocupación por que el cuadro de polarización en Venezuela se transforme en un obstáculo significativo para el diálogo entre el Gobierno y la oposición para el fortalecimiento democrático".

   Del otro lado, Estados Unidos ha indicado de manera contundente que está buscando "herramientas" adicionales para "encauzar" al Gobierno venezolano en una dirección más positiva, según ha informado este viernes el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.

   Además, el portavoz gubernamental ha insistido en que las acusaciones del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sobre los supuesta implicación de Estados Unidos en un plan para derrocar a su Ejecutivo, son "absurdas".

LA REACCIÓN DE LOS ORGANISMOS

   Los organismos de la región que han expresado su postura respecto a la detención del alcalde de Caracas han sido la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR).

   La primera ha condenado contundentemente la detención del alcalde por impedir la "construcción de un espacio de diálogo democrático en el país".

   De su parte, la UNASUR indicó que su papel no es "condenar o no" lo que ocurre en Venezuela, sino buscar escenarios para preservar la continuidad de la democracia en dicho país.

   No obstante, su presidente, Ernesto Samper, anunció que los cancilleres de la UNASUR celebrarán un encuentro extraordinario, cuya fecha será determinada tras una primera misión de los ministros de Exteriores de Brasil, Colombia y Ecuador, para analizar la situación en Venezuela.

   Otras organizaciones de Derechos Humanos como Human Rights Watch (HRW) condenaron drásticamente al Gobierno venezolano. El responsable de la organización para América Latina, José Miguel Vivanco, señaló que ante las "arbitrariedades" del gobierno venezolano, la "única esperanza" son reacciones "firmes" por parte de la comunidad internacional.

   Sin embargo, más con intención de acercar posturas que de condenar los actos, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, espera que todas las fuerzas políticas de Venezuela apuesten al "diálogo" para resolver sus diferencias, según su portavoz Stéphane Dujarric.

   Ban "confía en que todas las partes redoblen sus esfuerzos para avanzar" en un proceso de diálogo y espera "un amplio apoyo" a esa iniciativa con el fin de que "los desafíos políticos a los que se enfrenta Venezuela sean tratados de forma pacífica.