A coca grower of Yungas region holds coca leaves at the ADEPCOCA (Coca Growers
DAVID MERCADO / REUTERS

   LA PAZ, 10 Mar. (Notimérica) -

   El presidente de Bolivia, Evo Morales, promulgó este miércoles la nueva Ley General de la Hoja de Coca en Bolivia que pretende aumentar la extensión destinada a este producto a las 22.000 hectáreas.

   Con la implementación de esta nueva normativa se elimina la anterior, establecida en 1988, que prohibía la tenencia de fármacos o alimentos elaborados a base de esta planta milenaria.

   La nueva disposición prevé el aumento de la producción con diversos fines, entre los que se encuentra la investigación científica, medicinal y sociocultural. Además, con ella se pretende proteger la utilización irregular del producto y propone "dignifica al productor, comercializador, consumidor, industrializador".

   Asimismo, establece que la hoja verde sea usada para el masticado o 'acullico' y para usos rituales, medicinales, alimenticios e industriales. Además, se propone la creación de un Consejo Nacional de Revalorización, Producción, Comercialización, Industrialización e Investigación de la Coca (CON COCA).

   Por otro lado, estipula que el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras implemente el Registro de Productores de Coca bajo una reglamentación específica a través de la Dirección General de Desarrollo Integral de las Regiones Productoras de Coca (DIGPROCOCA).

CONSIDERACIONES

   La hoja de coca es considerada patrimonio cultural por la Constitución vigente desde 2009, especialmente su masticado o 'acullico' que, además, tiene Día Nacional el 11 de enero por ser una práctica ancestral de los pueblos andinos-amazónicos.

   Sin embargo, a pesar de los muchos aspectos beneficiosos para la salud que presenta este producto, como la regulación de la presión arterial o el control de la diabetes, la hoja de coca es utilizada en muchas ocasiones para otro tipo de fines.

   Es el caso de la producción y distribución ilegal o el narcotráfico, que supone una de las principales preocupaciones del país. Por ello, la derogación de la Ley 1.008 --antecesora de la actual-- supone un momento clave para la sociedad boliviana, ya que esta fijaba determinados parámetros para la lucha contra esta lacra.

   La ampliación de las zonas de cultivo, de 20.000 hectáreas legales de hoja verde en todo el país a 22.000 --14.300 distribuidas en el departamento de Las Yungas y 7.700 en la provincia de Chapere, perteneciente a Cochabamba-- no ha sido bien acogida por todos.

   Es el caso de los productores que cultivan dicho producto en Las Yungas, que consideran que con esta nueva ampliación se benefician los cultivos en el Chapare, además de asegurar que estos no llegan a mercados legales y se utiliza para la fabricación de cocaína.

USO ILEGAL

   Para muchos de los detractores de esta nueva legislación, la hoja que se cultiva en Chapere no presenta las mismas características que la del departamento de Las Yungas, por lo que será más probable la distribución de cocaína en este lugar frente al 'acullico'.

   Así lo defendió el senador de la oposición Óscar Miguel Antelo, que considera que la producción de Cochabamba terminará siendo materia prima de la droga porque "la hoja que produce en esa zona no se usa para el consumo, por ser amarga, áspera y gruesa".

   Su idea fue reforzada por el exrepresentante en Bolivia de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (ONUDD), César Guedes, quien manifestó que el 94 por ciento de la coca de Cochabamba no pasa por el mercado legal, según indica 'Télam'.

   Cabe destacar que estos argumentos en contra de la nueva se fundamentan en un estudio realizado por el Gobierno boliviano en 2013 que apunta que la demanda legal de coca en el país se satisface con el cultivo de 14.700 hectáreas, en lugar de las 22.000 actuales.