Actualizado 12/12/2016 18:59

La UE firma en presencia de Santos el fondo para apoyar el acuerdo de paz

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BRUSELAS, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea ha firmado este lunes, en presencia del presidente del Gobierno de Colombia, Juan Manuel Santos, el acuerdo para poner en marcha el fondo fiduciario de 95 millones dedicado a apoyar la implementación del acuerdo de paz alcanzado entre el Ejecutivo colombiano las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintiocho y el comisario de Cooperación Internacional y Desarrollo, Neven Mimica, ha rubricado en nombre de la UE el acuerdo para comenzar a aplicar el fondo fiduciario, en presencia de la Alta Representante de Política Exterior y Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, y el presidente colombiano, que recogió este sábado el Premio Nobel de la Paz.

Antes de la ceremonia de firma, la jefa de la diplomacia europea ha subrayado que los 52 años de conflicto y las 220.000 fallecidos en él "reflejan historias reales, sufrimiento y familias despojadas de sus series queridos". También ha destacado que el acuerdo final "brinda la oportunidad de superar las divisiones y trabajar juntos por un nuevo comienzo".

"Ahora ha llegado el momento de trabajar por la verdadera reconciliación. Esto puede llevar más tiempo que las negociaciones. Este último tramo hacia la paz puede resultar el más difícil y sin embargo es esencial. La reconciliación siempre es posible, nuestra historia en Europa nos lo recuerda", ha expresado Mogherini.

Además, la italiana ha recordado que la UE ha acompañado a Colombia "desde el inicio de las negociaciones formales". "Queremos apoyar con medidas pragmáticas el paso de este acuerdo de paz a la plena reconciliación", ha asegurado.

SANTOS AGRADECE EL APOYO "FUNDAMENTAL" DE LA UE

Por su parte, el presidente colombiano ha agradecido a la UE y a los Estados miembros su apoyo "fundamental", que a su juicio ha sido "determinante" y "definitivo". "Este nuevo respaldo de la UE es para nosotros una señal de confianza que nos anima a seguir adelante en esta nueva etapa", ha afirmado.

Santos ha concretado que el fondo se utilizará para invertir principalmente en iniciativas de desarrollo rural, algunas de las cuales ya están en marcha. Con el fondo fiduciario europeo, ha señalado, ya son cuatro los fondos financieros en apoyo al postconflicto colombiano.

"Es algo que para Colombia es maravilloso. El último conflicto de la región que termina y comienza ahora la construcción de la paz, que sabemos que va a ser difícil y dura, pero que tenemos que perseverar para lograrla", ha confiado.

El Gobierno de Colombia y la guerrilla alumbraron un nuevo documento el 12 de noviembre tras un mes de discusiones a medio camino entre La Habana y Bogotá. Para evitar un nuevo plebiscito, el nuevo texto ha sido refrendado en el Congreso por unanimidad de los presentes en las dos cámaras.

El fondo fiduciario está compuesto por un total de 95 millones de euros, de los cuales 72 provienen del presupuesto comunitario y el resto de las aportaciones de 19 Estados miembros. España participa en el mismo con una aportación que asciende a 3 millones de euros.

También contribuyen Croacia, República Checa, Chipre, Francia, Alemania, Hungría, Italia, Irlanda, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Portugal, Suecia, Reino Unido, Eslovaquia y Eslovenia. En todo caso, que el fondo funcionará hasta 2020 y podrá ser extendido, está abierto a la participación del resto de países de la UE.

La financiación aportada por el fondo se dedicará principalmente al desarrollo de zonas rurales y llegará a partir de febrero del próximo año, según han explicado fuentes europeas. El fondo fiduciario forma parte de un paquete total de 600 millones de euros en apoyo a la fase post-conflicto, de los cuales 400 millones corresponden a préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

Tras la firma del primer acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC, la UE sacó a la guerrilla de su lista de organizaciones terroristas durante un periodo temporal de seis meses, una decisión que se mantuvo a pesar del resultado del referéndum que rechazó este primer acuerdo.