Actualizado 09/01/2006 19:36

UE/Cuba.- Los liberales piden a la UE cambiar su política respecto a Cuba

Creen que el enfoque actual no es "correcto" para mejorar la situación en el país


BRUSELAS, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Grupo Parlamentario de la Alianza de Liberales y Demócratas Europeos (ALDE) ha presentado una pregunta oral para su debate en el Parlamento Europeo (PE) en la que cuestiona la política de la Unión Europea respecto a Cuba.

En concreto, los liberales quieren saber si el Consejo sigue pensando que los resultados de su nueva política "son satisfactorios" y si la política que está aplicando actualmente con las autoridades de Cuba "constituye el enfoque correcto para mejorar la situación en ese país".

En e texto, que se debatirá durante la mini-sesión plenaria que tendrá lugar en Bruselas los días 1 y 2 de febrero próximos, se recuerda la expulsión de la que han sido objeto algunos eurodiputados cuando pretendían entrar en Cuba para participar en actos organizados por la disidencia o la "continua" represión de los disidentes.

Además, el PE podría tener la oportunidad de pronunciarse sobre la reciente decisión de las autoridades cubanas de impedir a las 'Damas de Blanco' viajar a Estrasburgo el pasado diciembre a recoger el Premio Sajarov que cada año concede la Eurocámara.

Según los liberales, para el Parlamento Europeo sigue siendo "inconcebible" que continúe habiendo personas encarceladas en Cuba por sus ideales y por su actividad política pacífica.

"El hecho de que algunos de estos presos políticos no reciban la asistencia que necesitan debido a su precario estado de salud es particularmente inaceptable y escalofriante. Hay que señalar que algunos de ellos se encuentran incluso a las puertas de la muerte", indica la pregunta presentada por los eurodiputados Graham Watson, Cecilia Malmström, Emma Bonino y Marco Pannella.

En su resolución de noviembre de 2004, el PE, en línea con sus posiciones anteriores, subrayó que el "respeto a los Derechos Humanos y las libertades fundamentales básicas constituyen condiciones indispensables para una eventual modificación de la posición común de la Unión Europea sobre Cuba y de las medidas adoptadas unánimemente el 5 de junio de 2003", es decir, las sanciones impuestas tras la detención y el encarcelamiento de 75 disidentes y las subsiguientes ejecuciones sumarias de tres secuestradores.

En enero de 2005, el Consejo modificó su política con respecto al Gobierno cubano pero, según los liberales, "la esperanza de una actitud más abierta por parte del régimen castrista no parece haberse hecho realidad. Por el contrario, la situación de los Derechos Humanos se ha deteriorado".

APUESTA DE ZAPATERO

En su declaración de 13 de junio de 2005, el Consejo optó por mantener en suspenso las medidas adoptadas el 5 de junio de 2003 pese a constatar que no se habían registrado avances satisfactorios en la situación de los Derechos Humanos en Cuba.

Uno de los principales defensores de mantener el diálogo con las autoridades cubanas ha sido el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, a la vista de que la congelación de las relaciones con la isla tampoco había dado resultados para lograr una paulatina democratización del país caribeño.