MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, destacó hoy la "independencia y autonomía" demostrada por los Veintisiete en materia de política exterior al decidir eliminar las sanciones diplomáticas a Cuba vigentes desde 2003 --aunque suspendidas desde 2005--, a pesar de la oposición de Estados Unidos a este respecto.
Tras subrayar que el levantamiento de las sanciones supone un "éxito diplomático" de España --uno de los países promotores de la medida-- López Garrido recordó las manifestaciones públicas emitidas desde la Casa Blanca antes y después de la decisión de los ministros europeos, así como los contactos mantenidos entre la Administración Bush con algunos Gobiernos europeos, en los que hizo saber que "no le gustaba nada" la idea de eliminar las sanciones.
En rueda de prensa tras participar en un seminario organizado por la Fundación Alternativas sobre la política española hacia la UE, López Garrido indicó que el Gobierno español transmitió a las autoridades cubanas lo acordado el viernes de madrugada en Bruselas por los ministros de Exteriores de los Veintisiete.
El secretario de Estado para la UE confirmó que el Gobierno cubano se tomará "su tiempo" antes de responder a la oferta de diálogo por un año que la UE le ha planteado y cuya continuidad condiciona no obstante a que se produzcan avances concretos en materia de Derechos Humanos.
En particular, los Veintisiete han pedido a La Habana la liberación de todos los presos políticos, que abra las prisiones a organizaciones humanitarias internacionales y que ratifique y ponga en práctica los dos pactos internacionales sobre Derechos Humanos firmados recientemente.
López Garrido esperó que el Ejecutivo cubano vea el levantamiento de las sanciones como un "avance" que "facilita el diálogo político con Cuba e incluso la posible apertura de futuros acuerdos de cooperación".
Preguntado por las declaraciones de Fidel Castro, que ha manifestado su "desprecio" por la "hipocresía" que implica la decisión de la UE de eliminar las sanciones, López Garrido dijo quedarse con las palabras del ministro cubano de Exteriores, Felipe Pérez Roque, quien tras conocer la decisión de los ministros europeos consideró que representaba "un paso en la dirección correcta".
No obstante, Pérez Roque precisó en ese momento que aún no conocía el texto completo acordado por la UE e indicó que el Ejecutivo cubano respondería a la oferta europea una vez hubiera analizado con tiempo el documento. El ministro cubano subrayó además que Cuba no acepta "tratar bajo presión ni bajo imposiciones".