CIUDAD DE MÉXICO, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea cuestionó el elevado coste de las pasadas elecciones mexicanas, celebradas el 2 de julio, a las que consideró las más caras de América Latina y una de las más onerosas del mundo. Asimismo, propuso la celebración de una segunda vuelta electoral ante la escasa diferencia de sufragios entre los dos partidos más votados.
En un informe entregado al Instituto Federal Electoral (IFE), la Misión de Observación que participó en los comicios presidenciales recomendó revisar los costes de financiación de las campañas para tener una mayor legitimidad democrática, según informa el diario local 'El Universal'.
Ante el resultado tan cerrado entre los dos principales contendientes --Felipe Calderón (PAN) y Andrés Manuel López Obrador (PRD)--, los observadores europeos propusieron la instauración de una segunda vuelta electoral y explicar a la sociedad los mecanismos y filosofía del recuento rápido y del Programa de Resultados Electorales Preliminares.
El grupo de trabajo entregó un total de 49 recomendaciones, entre las cuales también están la disminución de la duración de las campañas y la modificación del relevo de los integrantes del Consejo General del IFE y de los magistrados del Tribunal Electoral, con el objetivo de que se haga de manera gradual "para asegurar la memoria de las instituciones". Actualmente la renovación de esas instancias se da en bloque, no de manera individual.
"TRANSPARENTES Y BIEN ADMINISTRADAS"
El jefe de la misión, el diputado del Partido Popular José Ignacio Salafranca, planteó también ajustes en el voto de los mexicanos residentes en el exterior y en la participación de las mujeres, así como la optimización de las casillas especiales y la adaptación del padrón electoral.
Como conclusión, los observadores europeos calificaron las elecciones de "competidas, transparentes y bien administradas".
Respecto al anteproyecto de presupuesto del IFE para 2007 --que considera 700 millones de pesos () más que en 2006 para repartir entre los partidos--, Ugalde justificó el aumento solicitado debido a que "el IFE no decide".
PRI, PVEM, Alternativa Socialdemócrata y Nueva Alianza coincidieron en que la financiación a los partidos es "gigantesco", por lo que apoyaron una reforma electoral "urgente". La fórmula del IFE para determinar el gasto de institutos políticos prevé un "factor multiplicador" de ocho --en lugar de seis, que se utilizó en 2005-- por el registro que obtuvieron Nueva Alianza y Alternativa.