Actualizado 28/08/2009 23:42

UNASUR.- Uribe rechaza la propuesta de convocar a Obama a un encuentro con la UNASUR para debatir el tema de las bases

Uribe aclara que el acuerdo militar con EEUU "esta cerrado", aunque no se opone a que sea revisado por la OEA

BUENOS AIRES, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, rechazó hoy la propuesta que hicieron varios de sus homólogos en la cumbre extraordinaria de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) de convocar a una reunión al mandatario estadounidense, Barack Obama, para debatir el acuerdo con Bogotá que contempla el uso de siete bases militares colombianas por parte de soldados norteamericanos.

"No nos parece que debamos llamar a cuentas al presidente Obama", dijo Uribe durante su segunda intervención en el encuentro que se celebra en la localidad argentina de Bariloche, al responder a las duras críticas que han lanzado varios de sus pares a su política de seguridad.

Para Uribe no es necesario que Obama tenga que comparecer en una reunión presidencial ante los 12 gobernantes del bloque sudamericano, porque Colombia puede "demostrar que no son bases norteamericanas", aunque lamentó que, pese a sus esfuerzos, "seguirá el caballito de batalla" de las acusaciones por parte de otras naciones.

"Una cosa es procurar tener el mejor diálogo con Estados Unidos y otra llamar a cuentas sobre este tema al presidente Obama", insistió el presidente colombiano. "¿Que tal que la Unión Europea llame a cuentas a alguno de nuestros mandatarios?", se preguntó.

Los mandatarios de la UNASUR expresaron sus puntos de vista sobre el acuerdo militar entre Bogotá y la Casa Blanca. Venezuela, Ecuador, Bolivia y Uruguay fueron los países más enfáticos en rechazar este convenio que ha despertado una crisis continental sin precedentes. Brasil, Argentina y Chile han sido más mesurados pero han exigido a Colombia más explicaciones sobre los alcances de la cooperación militar.

Al defender su proyecto militar, Uribe explicó que "la Constitución de Colombia no permite que el gobierno autorice tránsito de tropas, aviones de guerra sin el permiso explícito del Senado de la República o del Consejo de Estado", por tanto aclaró que el alcance del acuerdo no permite "el tránsito de aviones de guerra" en tierras colombianas.

DESMIENTE A CHÁVEZ

Tras escuchar los comentarios de sus pares sudamericanos, Uribe dedicó unos minutos a desmentir las declaraciones de su homólogo venezolano, Hugo Chávez, quien aseveró que Estados Unidos utilizará las bases militares para aplicar una "estrategia global de dominación" que está supuestamente descrita en un documento denominado "Libro Blanco del Comando de Movilidad Aérea", que acaparó la atención de la cumbre de este viernes.

Uribe explicó que se trata de un documento académico que no tiene ninguna implicación oficial en la política de seguridad que la Casa Blanca emprenderá con respecto al convenio de cooperación militar con Colombia. Además, aclaró que no es un texto secreto porque está en Internet y, por tanto, afirmó que lo que dijo Chávez "no es un descubrimiento".

"El alcance de nuestro acuerdo con Estados Unidos habla de inteligencia táctica y operativa no inteligencia estratégica, lo reduce al tema del narcotráfico y el terrorismo, y lo reduce al tema territorial de Colombia", indicó el mandatario.

Chávez mostró copias del texto denominado "Libro Blanco del Comando de Movilidad Aérea" (Global En Route Strategy) que contempla la colocación de bases que son identificadas como "localidades de cooperación" en las instalaciones militares de Palanquero, Colombia, y "posiblemente" en la isla de Aruba, "en las narices de Venezuela".

Se trata de un "documento muy reciente, de comienzos de este mismo año", dijo el presidente venezolano, al explicar que el texto se refiere a la "estrategia global de dominación de Estados Unidos" lo que constituye "la razón de que se estén instalando esas bases en Colombia".

El presidente colombiano aprovechó la ocasión para acusar a Chávez de llevar a cabo "juegos de guerra" con Bogotá al amenazar a su gobierno con preparar un arsenal militar en caso de que los militares estadounidenses pisen suelo venezolano. "Jamás hemos hecho una amenaza a un vecino", subrayó Uribe.

"El presidente Chávez ha expresado que en cualquier momento encenderá los aviones Sukhoi y que en pocos minutos están en Colombia. Nosotros hemos sufrido permanentes amenazas verbales de ataque", lamentó.

NO SON BASES

Uribe ha reiterado que Washington no instalará bases militares en territorio colombiano y volvió a asegurar que la presencia de los soldados norteamericanos no constituirá una amenaza para el resto de los países. "Para nosotros la soberanía es un tema que existe en la protección propia y el respeto a los vecinos", afirmó.

El mandatario se mostró dispuesto a que el convenio militar sea revisado por sus colegas de la región, pero insistió en que "por mucho que digamos que no son bases militares, hay casos en los cuales no se entenderá, y podemos demostrarlo y seguirá el caballito de batalla de que sí son".

"Estamos de acuerdo con que se mire nuestro acuerdo, pero está cerrado (...) no tenemos inconvenientes en que se revise en Consejo de Defensa siempre y cuando se haga de la mano de la Organización de Estados Americanos (OEA)", dijo el mandatario al hacer un llamamiento a que también se revisen "todos los casos de acuerdos militares que hay en la región".

Sobre la propuesta del presidente boliviano, Evo Morales, de firmar una declaración que rechace las bases extranjeras en Sudamérica, Uribe opinó que no se puede "aprobar una proposición que cualquiera de sus interpretes pueda entender como una prohibición para este acuerdo".

Pero una de sus respuestas más contundentes la dirigió a su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa, quien le acusó de ser "cómplice" de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de no vigilar sus fronteras para evitar que los rebeldes salgan de territorio colombiano.

Uribe fue enfático al aclarar no ha tenido una "visión hegemónica" del conflicto armado que azota a su país desde hace más de 60 años. "El problema sí es nuestro, pero el problema tiene trascendencia en el vecindario y nosotros pedimos ayuda", indicó.