MONTEVIDEO, 27 Ene. (EP/AP) -
Los abogados del ex dictador uruguayo Juan María Bordaberry, encarcelado preventivamente por acusaciones de 14 homicidios y que está internado en un hospital, pidieron este viernes a la justicia que se le conceda el beneficio de la "prisión domiciliaria por razones de salud".
Bordaberry, de 79 años, sufre varias dolencias, incluidas algunas respiratorias. En noviembre, fue operado del estómago, un par de semanas antes de ser procesado por cuatro homicidios especialmente agravados. El pasado fue internado de urgencia en el Hospital Británico, por orden de su médico y con autorización del juez que entiende en su causa.
Los abogados del ex dictador informaron a través de un comunicado que presentaron una solicitud al magistrado para que se realicen "los peritajes pertinentes, a fin de acreditar que las condiciones de salud de su defendido es incompatible con su permanencia en reclusión y disponga el arresto domiciliario".
Indicaron que la petición se fundamenta en un dictamen realizado por los médicos que lo están atendiendo. Agregaron que estos estudios constataron un "deterioro señalado y progresivo de la salud" de Bordaberry desde que ingresó a prisión.
Los médicos establecieron que "es portador de una patología respiratoria severa, en la que se destaca un asma bronquial con un patrón obstructivo fijo, al que se asocian alteraciones anatómicas de entidad".
Manifestaron, además, que "la edad del paciente es un factor de riesgo relevante, ante la eventualidad de cualquier exacerbación de su enfermedad pulmonar y el incremento del riesgo de una neumonía aguda, al encontrarse en una situación de reclusión".
La solicitud de los abogados se basa en una disposición legal que establece que frente a un caso de este tipo el juez puede disponer, previo los peritajes correspondientes, el arresto domiciliario u otra medida sustitutiva.
Bordaberry fue procesado preventivamente en una primera decisión el 18 de noviembre por el juez penal Roberto Timbal, por los asesinatos de los legisladores Zelmal Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz y de los guerrilleros tupamaros Rosario Barredo y William Whitelaw, ocurridos en 1976 en Buenos Aires.
Por esta causa también está preso preventivamente el ex ministro de Asuntos Exteriores de la dictadura militar Juan C. Blanco, de 72 años, quien tiene otro proceso por la desaparición y muerte de la maestra anarquista Elena Quinteros en 1976.
El 20 de diciembre, la juez de lo penal, Graciela Gatti, dispuso un segundo procesamiento a Bordaberry, por otros 10 homicidios especialmente agravados de militantes izquierdistas detenidos-desaparecidos.
Gatti, sin embargo, no procesó a Bordaberry por atentado contra la Constitución al entender que la causa había prescrito.
Con apoyo militar, Bordaberry, que fue elegido y asumió en 1972 como presidente constitucional, en junio de 1973 dio un golpe que clausuró el congreso, censuró a la prensa y prohibió las actividades sindicales y políticas.
Tres años después, irreconciliables desavenencias políticas determinaron que Bordaberry fuera depuesto por los militares. La dictadura finalizó en 1985. La familia Bordaberry sostiene que el procesamiento obedeció a cuestiones políticas.