PARAGUANÁ (VENEZUELA), 9 Sep. (Reuters/EP) -
Las autoridades venezolanas han arrestado este martes a siete personas por presunto contrabando de combustible, según confirman una fuente de la industria y otra policial, en momentos en que el Gobierno busca frenar la fuga de su combustible altamente subsidiado a través de la frontera.
Un buque petrolero de la compañía estatal PDVSA cargó 60.000 barriles de diésel en la refinería de Cardón a pesar de tener autorización para embarcar sólo 10.000 barriles, según ha explicado un funcionario policial que ha pedido no ser identificado.
Agentes de Inteligencia descubrieron el hecho en una inspección realizada en la noche del lunes, según un empleado de PDVSA que también solicitó la condición de anonimato. Las autoridades creen que los sospechosos pretendían revender el combustible en el extranjero.
Enormes subsidios han vuelto al combustible en Venezuela tan económico que llenar un tanque promedio de gasolina cuesta menos que el equivalente a 0,01 dólares, bajo la tasa de cambio del mercado negro. El propio Gobierno ha dicho que la subvención le cuesta unos 12.500 millones de dólares anuales.
Los subsidios también han fomentado el lucrativo negocio del contrabando de combustible a países vecinos, donde se vende por valores cercanos a los registrados en los mercados internacionales.
El Gobierno de Nicolás Maduro ha buscado frenar el contrabando para apuntalar al erario público en medio de un desplome de los precios del crudo, su principal fuente de divisas.
Las autoridades arrestaron en enero a la ex directora general de Mercados Internos del Ministerio de Petróleo, encargada de supervisar el mercado local de los combustibles, por presuntamente incurrir en irregularidades asociadas a la distribución de gasolina.