CARACAS, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Venezuela advirtió hoy de que responderá "con medidas muy firmes" a las acusaciones de las autoridades colombianas sobre el supuesto suministro de armas de fabricación sueca a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Así, Caracas ratificó su "rechazo a esta grosera campaña, al tiempo que advierte que cada agresión del Gobierno colombiano será respondida con medidas muy firmes", y expresó su "indignación" por estas acusaciones que han "aniquilado los esfuerzos emprendidos por construir una relación binacional para beneficio de ambos pueblos".
El Gobierno de Hugo Chávez lamentó que esta situación, así como "la locura guerrerista de la élite que hoy gobierna Colombia", esté "poniendo claramente en peligro la paz y la estabilidad de la región", y hace un llamamiento a los "pueblos de la región" a poner fin a esta política que "pretende convertir a Suramérica toda en un área de violencia".
"La Colombia de hoy, ocupada militarmente y regentada por una élite belicista, se ha constituido en un peligro latente para la región entera", señala el Ministerio de Exteriores venezolano en comunicado divulgado este jueves.
Colombia aseguró que en octubre de 2008 decomisó a las FARC varias armas --entre ellas lanzacohetes-- que formaban parte del lote vendido por el Gobierno de Suecia a Caracas en el año 1988. Estocolmo ha confirmado esta información y ha pedido a Caracas explicaciones de cómo este arsenal llegó a manos de esa guerrilla.
Ante esta situación, Chávez ordenó congelar esta semana las relaciones con Bogotá dejando abierta la posibilidad de romper definitivamente con todos los lazos que mantiene con su país vecino y segundo socio comercial.
Para Caracas, estas acusaciones "son la ilustración de la hipocresía" con la que pretenden "justificar la instalación en su territorio de hasta cinco bases militares" de Estados Unidos "alegando que tres lanzacohetes supuestamente propiedad del ejército venezolano habrían llegado a manos de un grupo irregular".
Exteriores condenó al Gobierno de Álvaro Uribe de no querer explicar "cómo circulan en su territorio miles de armas en manos de grupos irregulares, sino que exige cínicamente" a Venezuela explicar el origen de tres lanzacohetes.
"¿Por qué no exigirle a los Estados Unidos o a Israel ofrecer explicaciones de cómo miles de armas fabricadas en esos países están en manos de los ejércitos guerrilleros dentro de Colombia?", se preguntan las autoridades venezolanas.
"Si la oligarquía colombiana, ante su fracaso histórico de construir un país viable, ha tomado la deshonrosa decisión de entregarlo en comodato a los Estados Unidos, debe asumirla con claridad frente al pueblo de Colombia antes que escudarse detrás de pretextos absurdos", señala el comunicado.
Venezuela criticó además a las autoridades colombianas por pretender hacer ver que "los sesenta años de guerra interna no son responsabilidad de Colombia sino de sus países vecinos, con una particular preferencia por aquellos donde hoy gobiernan fuerzas de izquierda".