Actualizado 20/09/2007 22:43

Venezuela/España.- El Gobierno no se quejará formalmente a Caracas por las invasiones porque Chávez está colaborando

Moratinos considera que sería "incongruente e irreponsable" a pesar de la moción aprobada hace diez días por el Senado


MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, anunció esta tarde que el Gobierno español no presentará una queja formal ante las autoridades venezolanas por la invasión de propiedades de nuestros ciudadanos en ese país porque considera que sería una actitud "incongruente e irresponsable" ya que el Gobierno de Hugo Chávez está colaborando de forma "excelente" para que se resuelvan todos los casos pendientes.

Así lo aseguró Moratinos durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Iberoamericanos de la Cámara Alta ante la pregunta del portavoz del Grupo Popular, Dionisio García Carnero, sobre la moción que fue aprobada el pasado 11 de septiembre en el Pleno del Senado, a iniciativa de los 'populares', para que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero protestara formalmente ante Caracas por las invasiones de tierras.

"No vamos a presentar protesta porque gracias a las autoridades venezolanas un gran número de casos se han resuelto y ha habido una colaboración excelente de su parte", afirmó Moratinos, para quien sería una "incongruencia y una irresponsabilidad" hacerlo cuando Caracas está ayudando, ya que el Gobierno considera que obtendrá mejores resultados "no con protestas sino con diálogo". "Vamos a seguir trabajando y esperamos obtener pronto una buena solución", añadió.

ESTUDIAR LA AYUDA ECONOMICA

Asimismo, titular de Exteriores recordó que tanto la Embajada española como el Consulado en Caracas siempre prestan ayuda jurídica a todos los españoles que la necesitan para su defensa en los tribunales de justicia de Venezuela, y sobre la posibilidad de ofrecerles también ayuda económica, Moratinos dijo que "habrá que estudiarla" y que, en todo caso, dependerá de cada caso y de sus circunstancias.

El pasado 11 de septiembre, el Senado pidió al Gobierno que protestara formalmente ante el Ejecutivo venezolano por las "invasiones de propiedades, amenazas y agresiones personales" sufridas por algunos ciudadanos españoles en ese país, en una votación que contó con 131 votos a favor del PP, CiU, PNV y CC, frente a 109 en contra de los socialistas y Entesa Catalana de Progrès y dos absteciones.

Aquél día, el PP, para ganar los votos del Grupo de Senadores Nacionalistas Vascos, retiró uno de los puntos originales de la moción que exigía al Ejecutivo que iniciara acciones judiciales ante los tribunales internacionales por la "vulneración de los derechos" de los ciudadanos españoles ya que, según advirtió entonces el senador del PNV Iñaki Anasagasti, una acción así podría provocar algún tipo de represalias para los españoles residentes en ese país.

DERIVA TOTALITARIA

Ante las reiteradas críticas del senador Anasagasti, esta tarde el ministro de Exteriores volvió a defender la actuación del hasta hace un mes embajador de España en Venezuela, Raúl Morodo, cuya labor calificó de "excepcional". El Consejo de Ministros aprobó hace un mes su relevo por el diplomático de carrera Dámaso de Lario, a quien Moratinos ha pedido que tenga como prioridad resolver los casos pendientes de invasiones de propiedades.

Durante sus intervenciones, Anasagasti y García Canero volvieron a criticar la constante "complacencia" del Gobierno con Hugo Chávez, su falta de firmeza ante violaciones de derechos como el cierre del canal RCTV y la deriva totalitaria que se viven en ese país, con un Parlamento "monocolor" sin presencia de partidos de la oposición y con una reforma constitucional pendiente de aprobación con la que el presidente venezolano pretende "perpeturarse en el poder".

Moratinos insistió en que el Ejecutivo apuesta por el diálogo y el respeto a la soberanía venezolana, recordó que la falta de representación de la oposición en la Asamblea Nacional se debió a su decisión de boicotear las últimas elecciones legislativas no presentándose y que, "guste o no", el presidente Chávez ha sido elegido en varios procesos electorales, cuyos resultados han sido siempre avalados por las misiones de observación internacional.