Actualizado 31/01/2006 18:11

Venezuela.- Navantia desvincula su contrato de la venta de aviones y subraya que su operación ya superó la trámites

El embajador venezolano insistió la pasada semana en que ambos contratos son independientes y que el veto sólo afecta a los aviones


MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

La empresa naval española Navantia desvinculó hoy el contrato de venta de ocho patrulleras vigilancia oceánica y de litoral suscrito el pasado 28 de noviembre en Caracas con el Gobierno venezolano de la venta de doce aviones de transporte militar rubricada ese mismo día por la compañía aeronáutica española EADS-CASA con el Ejecutivo que preside Hugo Chávez.

Fuentes de la compañía naval subrayaron a Europa Press que ambos contratos son "absolutamente independientes" y que la venta de patrulleras se encuentra ya en una fase avanzada, tras haber completado el periodo de tramitación legal requerido por Venezuela.

Las fuentes consultadas señalaron que la operación ha sido aceptada por la Contraloría venezolana, el organismo encargado de supervisar y autorizar este tipo de acuerdos comerciales, y ha sido elevada a la fase de Escritura Pública, último trámite necesario para culminar la venta e iniciar la construcción, previa planificación, de las patrulleras, cuyo coste inicial asciende a 1.200 millones de euros.

El hecho de haber superado la fase de tramitación en el país iberoamericano implica que la venta de las patrulleras ha entrado ya en una primera fase, lo que conlleva que si el cliente --en este caso el Ministerio de Defensa venezolano-- decide rescindir unilateralmente el contrato, debería afrontar una penalización por incumplimiento del mismo, una cantidad dependiente del gasto ejecutado por Navantia.

El propio embajador de Venezuela en España, Arévalo Méndez, insistió hace una semana en una entrevista concedida a Europa Press en que el "boicot" estadounidense sólo afectaba a los doce aviones y, en ningún caso, a las ocho patrulleras que construirá Navantia.

"La entrega de barcos o patrulleras no se ve afectada. No tiene absolutamente nada que ver un contrato con otro. Van por separado y cada una se irá aplicando en función de los términos de los contratos", subrayó.

En este sentido, indicó que "se empieza una nueva negociación entre el Gobierno venezolano y la empresa" EADS-CASA sobre las aeronaves y que ambas partes ya están en contacto, debido a que la medida adoptada por la Administración Bush afecta, sobre todo, a los componentes de navegación y que "modificar la constitución de un equipo como éste para incluir nuevas tecnologías podría retardar un poco el cronograma de entrega (de aparatos), así como también el precio".

Méndez subrayó que el Ejecutivo de Caracas hará las evaluaciones pertinentes de la propuesta que le haga EADS-CASA, con el objetivo de concluir un nuevo acuerdo en el que se sustituya la tecnología estadounidense por otra de tipo europeo --francesa, italiana o alemana-- o "asiática, que es muy buena por cierto".

Los dos contratos suponen la venta a Venezuela de ocho patrulleras (cuatro de vigilancia oceánica y cuatro de litoral) y doce aviones C-295 (cuatro de patrulla marítima y ocho de transporte), construidos por Navantia y EADS-CASA, respectivamente, por un montante de 1.700 millones de euros, de los cuales 500 corresponden a la venta de aeronaves.

PRESIONES DE CHÁVEZ

Por otra parte, fuentes conocedoras de la operación comercial entre las compañías españolas y el Gobierno venezolano atribuyeron las declaraciones del presidente Hugo Chávez, quien reclamó saber "de una vez" si España venderá las patrulleras o su país tendrá que comprarlas a otra nación, a un intento de "presionar" para conseguir que se materialice la venta de las aeronaves, dificultada tras el veto estadounidense a la transferencia de la tecnología que poseen los C-295.

Las citadas fuentes explicaron a Europa Press que las palabras del mandatario venezolano suponen una forma de presionar para que se culmine el proceso de venta de las aeronaves pero, en ningún caso, implican una advertencia sobre la posibilidad de paralizar la compra de las patrulleras.

Consultadas sobre la situación actual del contrato de venta de aeronaves a Venezuela, fuentes de la compañía aeronáutica EADS-CASA se negaron a entrar en valoraciones argumentando que su política informativa empresarial no permite informar sobre contratos en curso.