CARACAS, 9 Dic. (Reuters/EP) -
Tamara Adrián, la primera diputada transgénero de América Latina, ha prometido luchar por la igualdad ciudadana, independientemente de la condición sexual, desde el escaño que ha conseguido en las elecciones parlamentarias que se celebraron el domingo en Venezuela.
Adrián ha vivido la desigualdad de derechos en primera persona: después de una batalla legal de 11 años en el Tribunal Supremo de Justicia no ha podido cambiar su identidad, lo que la ha obligado a ir a las urnas con su nombre original, Tomás.
"En Venezuela no tenemos ningún derecho. Hay unas normas precarias y aisladas sobre el tema de la no discriminación y en materia laboral, pero nada más", ha dicho en una entrevista concedida a la agencia de noticias Reuters.
La diputada de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) por Caracas pretende cambiar esta situación y llevar al debate parlamentario los derechos de la comunidad LGTB, tal y como ya han hecho otros países latinoamericanos con los mismos obstáculos que Venezuela.
"Hay que hablar de lo que ya tienen países como México, Colombia, Ecuador y ahora están discutiendo en Bolivia", ha dicho la abogada de 61 años. "En cada uno de ellos existen derechos al matrimonio, a la maternidad y protección contra la discriminación", ha destacado.
Sin embargo, ha admitido que estas cuestiones no son prioritarias en estos momentos, teniendo en cuenta la situación de crisis económica y social que sufre Venezuela, por lo que ha señalado como objetivo principal revertir este contexto.
"La ley del matrimonio igualitario podría salir en muy poco tiempo (...), pero yo tengo conciencia, conozco la situación económica en la que está postrada Venezuela", ha afirmado.
Adrián es uno de los 112 diputados que la MUD ha conseguido en las elecciones parlamentarias del pasado 6 de diciembre arrebatando al 'chavismo' --por primera vez en 16 años-- el control de la Asamblea Nacional.