CARACAS, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Varias internas recluidas en el Centro de Reclusión del Instituto Nacional de Orientación Femenina en Los Teques, en el estado de Miranda (norte de Venezuela), han desmentido este lunes las acusaciones vertidas en un libro sobre que la exjueza María de Lourdes Afiuni fue violada hace dos años en dicho centro.
Afiuni fue detenida en diciembre de 2009 tras haber sido acusada de liberar, supuestamente de manera irregular, al empresario venezolano Eligio Cedeño, vinculado con operaciones cambiarias ilegales y que inmediatamente salió del país para evadir la justicia.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha pedido 30 años de prisión --la pena máxima en ese país-- para la jueza, que desde febrero de 2010 se encuentra en su vivienda recibiendo tratamiento médico por un presunto cáncer que padece. Sin embargo, tiene prohibido hacer declaraciones a la prensa.
Afiuni ha explicado en el libro 'Afiuni, La presa del comandante', escrito por el periodista Francisco Olivares, que fue violada antes de ser liberada del centro en el que estaba internada, lo que ha provocado una gran polémica en Venezuela debido al revuelo que existe en torno al caso de la jueza.
Varias internas han señalado a Venezolana de Televisión que Afiuni no habló cuando estaba arrestada en el penal sobre una violación. "Ella sabe los procedimientos y sabe que después de dos años, un médico no sabrá sí fue violada o no", ha indicado una de las presas bajo anonimato.
La magistrada ha indicado que tras la violación, se quedó embarazada, pero que posteriormente perdió el bebé en un aborto natural. Algunas presas han asegurado que recibía tratos de favor.
Anni Estaba, una de las internas que tenía contacto con Afiuni, ha señalado que "se le otorgaban visitas especiales, venían muchos amigos, abogados, jueces, fiscales y personas que podía entrar libremente al penal".
La exdirectora del centro penitenciario Isabel González ha asegurado que Afiuni estaba internada en una celda de máxima seguridad a petición propia "porque temía por su integridad física" y ha descartado que se produjera la violación por parte de alguno de los guardias.
El líder de la oposición y que busca la reelección como gobernador en el estado de Miranda, Henrique Capriles Radonski, ha señalado este lunes que las fuerzas de seguridad deben investigar estas acusaciones. "La denuncia de presunta violencia sexual de Afiuni es un hecho grave que obliga a una investigación inmediata", ha indicado.
"EL GOBIERNO LOS SABÍA"
El abogado de Afiuni, José Amalio Graterol, afirmó durante el fin de semana que el Ejecutivo venezolano y Naciones Unidas sabían que la magistrada había sido víctima de violación sexual durante su reclusión en el Instituto Nacional de Orientación Femenina.
"El Gobierno tenía conocimiento, no sabía que iba a ser público el delito, a las mujeres no les gusta hacer eso público, pero Afiuni tuvo el valor de revelarlo", añadió el letrado.