ASUNCION (Reuters/EP) - Las víctimas de un incendio que provocó más 300 muertos en Paraguay se congregaron el viernes para exigir justicia a las autoridades, en un clamor que por primera vez tuvo el apoyo explícito del presidente y el Poder Legislativo.
Poco antes de cumplirse el quinto aniversario de la tragedia, sobrevivientes y familiares de los fallecidos se manifestaron frente al Poder Judicial, al que pidieron acelerar una sentencia contra los responsables para evitar la extinción de la causa.
Los señalados por la fiscalía como principales responsables -dos propietarios y dos funcionarios del local- se encuentran en libertad desde hace casi un año, cuando un tribunal de apelaciones declaró nulo el juicio en el que fueron condenados a penas de entre dos y 12 años de prisión.
Las víctimas, cerca de un centenar, portaron carteles y cruces con retratos de los fallecidos para reclamar a la Corte Suprema de Justicia que ratifique las condenas.
Existe un descuerdo ente la fiscalía y la defensa sobre los plazos judiciales que deben aplicarse al polémico proceso, que estuvo plagado de incidentes y controversias desde su inicio.
"Seguimos calando el hilo de la injusticia que favorece a los Paiva (propietarios del supermercado), los asesinos de nuestros seres queridos y seguiremos clamando por la no extinción de la causa hasta que llegue un fallo justo", dijo Camen Rivarola, portavoz de una asociación de víctimas.
El reclamo fue apoyado por el presidente, Fernando Lugo, quien envió el miércoles una carta al titular de la Corte Suprema exhortando al organismo a tomar una decisión sobre el caso para evitar la extinción.
La carta fue criticada por parlamentarios de la oposición, quienes la calificaron como una intromisión directa que viola la independencia del Poder Judicial.
No obstante, la Cámara de Senadores también se pronunció en el mismo sentido que el mandatario en una declaración aprobada el jueves en la cual expresó solidaridad con las víctimas y exhortó a la Corte Suprema a que dicte sentencia.
La víctimas del incendio realizaron decenas de protestas, algunas violentas, desde el inicio del proceso que puso a prueba al frágil sistema judicial del país.
El incendio en el supermercado Ycuá Bolaños, considerado la mayor tragedia en tiempo de paz en la historia del país, ocurrió el 1 de agosto del 2004 en un barrio de la capital y dejó también cientos de heridos y niños huérfanos.