Actualizado 24/08/2012 03:21

Correa, "escéptico" ante un cambio de opinión de Reino Unido y Suecia porque "subestiman" a Ecuador

Dice que la amenaza británica de asaltar la Embajada en Londres ha sido un "error garrafal"


QUITO, 24 Ago. (Reuters/EP) -

El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, se ha mostrado "escéptico" ante la posibilidad de que tanto Reino Unido como Suecia cambien de opinión sobre la extradición del fundador de Wikileaks, Julian Assange, al país escandinavo, donde se le investiga por dos delitos sexuales, porque "siembre han subestimado" a Ecuador.

"Soy un poco escéptico ante la posibilidad de que Reino Unido, Suecia y Estados Unidos cambien de opinión, porque no están acostumbrados a hacerlo y es aún peor dialogando con un país del tercer mundo como Ecuador. Siempre nos han subestimado", ha dicho en una entrevista concedida a Reuters.

A pesar de ello, el mandatario ha reiterado su voluntad de conversar con Reino Unido para encontrar una solución a la situación del periodista australiano. "Siempre hemos confiado en el diálogo, la esperanza es lo último que se pierde", ha señalado.

Correa ha insistido en que su Gobierno no pretende evitar que Assange comparezca ante la justicia sueca, sino evitar que una vez en el país escandinavo sea extraditado a Estados Unidos, donde se estaría celebrando un juicio secreto en su contra por revelación de secretos de Estado, cargo por el que podría ser condenado a muerte.

Así, ha explicado que si Reino Unido y Suecia dan garantías por escrito de que el fundador de Wikileaks no será extraditado a Estados Unidos, éste podría declinar el asilo político concedido por Ecuador y viajar al país escandinavo.

"Estas garantías las pueden dar tanto Reino Unido como Suecia, sería perfectamente posible, pero ninguno de los dos ha querido darlas. Por eso creo que puede haber un interés oculto en extraditar a Assange a un tercer país", ha sostenido.

CONFLICTO BILATERAL

Por otro lado, el presidente se ha referido a la amenaza de Reino Unido de asaltar la Embajada de Ecuador en Londres para detener al fundador de Wikileaks, considerando que "ha sido un error diplomático garrafal".

"¿Usted imagina que una amenaza semejante hubiera sido realizada por un país del tercer mundo a un país del primer mundo, de Ecuador a Reino Unido o a Estados Unidos? Hubiera sido un escándalo mundial", ha señalado. "Esto también lo es, pero han tratado de minimizarlo, diciendo que es un problema bilateral", ha añadido.

En este sentido, el líder ecuatoriano ha sostenido que el caso de Assange ha empeorado "por la arrogancia, el etnocentrismo y el neocolonialismo que algunos países siguen mostrando hacia América Latina".

Sin embargo, ha argüido que también ha supuesto el inicio de una "nueva era" para la región. "No se trata de parchar un sistema que no han funcionado durante siglos, se trata de cambiar el sistema, y por eso enfrentamos los poderes nacionales e internacionales que quieren que las cosas continúen igual", ha dicho.

CASO WIKILEAKS

El periodista australiano se encuentra en la misión diplomática desde el 19 de junio, cuando solicitó a Ecuador el asilo diplomático. El Gobierno de Correa se lo concedió el pasado jueves, pero Reino Unido se ha negado a concederle un salvoconducto, insistiendo en que tiene la "obligación legal" de extraditarle a Suecia.

Assange solicitó asilo político argumentando que se encuentra en un "estado de indefensión" ante la posibilidad de que, una vez en Suecia, sea extraditado a Estados Unidos, donde supuestamente se está celebrando un juicio secreto, sin que Australia lo impida.

El fundador de Wikileaks asegura que es víctima de una "persecución política" por parte de Estados Unidos por revelar cientos de miles de documentos clasificados del Departamento de Estado sobre las guerras en Irak y Afganistán y sobre las relaciones diplomáticas con otros países.