Publicado 28/04/2016 11:49

Unas 50.000 personas se han beneficiado del proyecto 'Huellas de Paz' en Colombia

Fundación Humanismo y Democracia (H+D) presenta los resultados de Huellas de paz
FUNDACIÓN H+D

   MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

Unas 20.000 personas se han beneficiado de manera directa, y otras 30.000 de manera indirecta, del proyecto 'Huellas de Paz', que Fundación Humanismo y Democracia (H+D) lleva a cabo en Colombia desde hace seis años junto con la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia.

   Así lo ha anunciado este miércoles 27 de abril el presidente de H+D, Rafael Rodríguez-Ponga, en un acto celebrado en Casa de América (Madrid) en el que se han presentado los resultados del proyecto, que cuenta con la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

"Huellas de Paz' es un programa amplísimo de desarrollo rural en Colombia", ha afirmado el presidente de la entidad, Rafael Rodríguez-Ponga, quien señala que el objetivo del mismo es "mejorar la integración social, la participación, el bienestar de las familias, de los jóvenes, mayores, mujeres... de todos", así como contribuir a "mejorar las relaciones entre los dos pueblos, España y Colombia".

   El proyecto tiene como "eje vertebrador" al café, ya que este producto es el "centro de todo" de los colombianos y es el "medio ambiente natural" en el que se mueven, según ha señalado el presidente de la Fundación, quien asegura que otro de los resultados del proyecto es "la multiplicación" de los beneficios del desarrollo en el futuro.

   "Una vez que hay una población asentada en el campo, que tiene claros sus derechos sobre unos determinados lotes de producción del café, que han mejorado las condiciones de producción, que han mejorado el nivel educativo de niños y jóvenes para asegurar que en el futuro sean mejores cultivadores... es un efecto multiplicador a largo plazo", ha detallado.

   Según ha explicado, otro de los logros del proyecto ha sido, por ejemplo, la creación de asociaciones de campesinos, "de manera que ellos sean capaces de organizarse y llevar a cabo el trabajo y la producción". En total se han creado 29 asociaciones.

   Tal y como ha comentado Rodríguez-Ponga, muchos de los cafeteros "son población muy marginada, indígenas, o afrodescendientes o desplazados por el conflicto de las guerrillas", es decir, "gente que de repente se ha encontrado sin nada en mitad del campo". "¿Y qué hacen? Pues cultivan café", continúa. Por este motivo, la ayuda que les brinda la Fundación con el proyecto permite a estas personas tener una vivienda, agua potable, educación para sus hijos o la construcción de infraestructuras para la comunicación, según explica.

   "Si en el café y en la mejora de la producción del café, y en la mejora de las condiciones de vida, encuentran una solución a muchos problemas, la tentación de caer en el mundo de la droga decaerá", ha relatado el presidente de H+D.

   El proyecto se ha llevado a cabo en un total de 23 municipios rurales colombianos de los departamentos de Antioquía, Nariño, Cauca y Valle del Cauca, y se ha realizado a través de tres componentes de acción: social, ambiental y económico.