BUENOS AIRES, 9 Mar. (Notimérica) -
La multitudinaria movilización organizada en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer dejó restos amargos en Buenos Aires, la capital argentina que se tiñó de violeta y verde con el objetivo de reivindicar los derechos de las mujeres.
A pesar de que la marcha estuvo marcada por el pacifismo, al final del día se dieron graves incidentes que dañaron el mobiliario urbano. Es el caso de los alrededores de la catedral metropolitana de Buenos Aires, donde se quemaron diversos carteles y se realizaron pintadas, además de arrojar botellas de vidrio.
El suelo de la capital se llenó de plásticos y basura y fueron detenidas unas 30 personas, que arrojaron latas de cerveza a la Policía antidisturbios, encargada de velar por el orden en la zona cercana a la Plaza de Mayo, según informa el diario 'La Nación'.
No obstante, los vándalos no llegaron a la propia catedral debido al vallado que se colocó a su alrededor, además de a la actuación policial en las cercanías del lugar emblemático. Sin embargo, el Cabildo no tuvo tanta suerte, ya que se pintaron en sus paredes diversos mensajes de reclamos al Gobierno.
En la mayoría de las peticiones que podían leerse sobre la fachada del edificio histórico aparecían referencias a la ley que prohíbe el aborto en el país. Por su parte, los efectivos policiales defendieron la zona con balas de goma y gases lacrimógenos.
Cabe destacar que Argentina fue el único país en el que se dieron disturbios tras la manifestación del denominado '8M', unos ataques de los que no se libraron los periodistas y fotógrafos que se encargaban de cubrir el acontecimiento, debido a que algunos de los manifestantes agredieron a diferentes medios de comunicación nacionales; en concreto, a los reporteros de 'Todo Noticias', 'Canal 26' y 'C5N', de acuerdo con varios medios nacionales.