Actualizado 04/03/2016 14:25

Los bajos índices de lactancia materna en México son alarmantes

Los bajos índices de lactancia materna en México son alarmantes
MONASHEE ALONSO

   Por María José Madarnás, editora de Maternidad Fácil

   MADRID, 4 Mar. (Notimérica) -

   En México sólo un 14,5 por ciento de los bebés son amamantados de forma exclusiva hasta los seis meses. En zonas rurales el porcentaje es de poco más del 18 por ciento, una cifra también muy baja que preocupa al Ministerio de Salud por sus consecuencias a corto y largo plazo para los niños.

   La lactancia materna es una fuente natural de salud. Desde las primeras horas del nacimiento, la leche materna protege al niño de infecciones, virus y toxinas. El calostro es una vacuna natural que fortalece el sistema inmunológico del bebé.

   Además, la leche materna contiene todos los nutrientes, vitaminas y minerales que el bebé necesita para su buen desarrollo. No solo eso, es un alimento vivo a través del cual la madre transmite al bebé anticuerpos que la leche de fórmula no tiene y que refuerzan sus defensas y protegen su sistema gastrointestinal.

   Prolongar la lactancia tiene múltiples beneficios, tanto para la madre como para el bebé, por eso es fundamental trabajar desde todos los sectores para fomentar esta práctica.

LAS CAUSAS DE LA BAJA TASA DE LACTANCIA MATERNA

   Son muchas las causas que se pueden enumerar, pero las principales son la desinformación que hay sobre el tema, la proliferación de mitos falsos y las barreras culturales que impiden que las madres puedan dar el pecho el tiempo que recomienda la Organización mundial de la Salud(OMS).

   La falta de información hace pensar a muchas madres que la leche de fórmula es mejor que la leche materna para alimentar al niño. Incluso hay quienes creen que la leche de fórmula contiene también anticuerpos y que, al poder controlar las porciones es más seguro que el bebé se alimente correctamente si se elige esta forma de alimentación.

   Sin embargo, la lactancia a demanda asegura que el bebé se alimenta bien. Se debe dar el pecho tantas veces como el bebé lo pida. Solo con la lactancia materna es suficiente para que el niño reciba todos los nutrientes que necesita.

   Los mitos y falsas creencias en torno a la lactancia también hacen desistir a muchas madres de dar el pecho al niño. Esto se produce por la gran desinformación que hay y la falta de asesoría para las futuras madres, que en muchos casos no conocen cosas básicas como el tiempo óptimo de lactancia.

   Esta situación puede solucionarse fácilmente formando a los profesionales de la salud, para que puedan proporcionar la información adecuada a las madres ya desde el embarazo. De esta forma tanto las madres como su entorno familiar tienen tiempo para prepararse y aprender todo lo necesario para iniciar y mantener la lactancia con éxito.

LAS BARRERAS CULTURALES, MUROS A DERRIBAR

   También es muy importante crear campañas informativas y de promoción de la lactancia materna para derribar todas las barreras culturales que existen en torno a ella. Muchas veces por considerar que solo dan el pecho aquellas madres que no pueden permitirse comprar leche de fórmula, se termina de forma temprana con la lactancia en estratos más altos de la sociedad.

   También la reincorporación al trabajo es un momento crítico para mantener la lactancia, sobre todo la lactancia exclusiva, que debería extenderse hasta los seis meses. Crear entornos dentro de la empresa donde las madres puedan amamantar o extraerse la leche facilitarán que las madres no tengan que dejar la lactancia de lado al volver a trabajar.

   Crear campañas que creen conciencia de la verdadera importancia de la lactancia materna hará que cada vez más madres elijan amamantar a sus hijos. Mejorar los porcentajes en este ámbito debe ser una prioridad para toda la sociedad, pues gracias a la lactancia materna los niños se desarrollan mucho más sanos.