Actualizado 27/03/2006 22:07

Brasil.- Los pueblos indígenas reclaman en Brasil poder decidir sobre la explotación de los recursos naturales


CURITIBA (BRASIL), 27 Mar. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, María García) -

El Foro Internacional Indígena para la Biodiversidad reclamó hoy en la octava reunión de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (COP8) que se celebra en Curitiba (Brasil) poder decidir sobre la explotación de los recursos naturales, ser informados del uso de los recursos genéticos de los ecosistemas en los que viven y que se les reconozca su derecho a decir que no a un proyecto que se vaya a desarrollar en sus áreas.

El presidente del Foro Internacional Indígena para la Biodiversidad, el mapuche chileno José Naín, explicó hoy en rueda de prensa que el Convenio de Biodiversidad no puede ser aplicado sin los indígenas porque estos pueblos son los que viven donde están los recursos, pero advirtió de que en este Convenio se les mantiene al margen de las decisiones, porque son los Estados y las empresas los que deciden cómo proteger la biodiversidad y cómo acceder a los recursos, sin consultarles.

La primera reivindicación de los pueblos indígenas es el reconocimiento de su existencia y sus derechos dentro de cada país, para poder tener voz en la toma de decisiones sobre creación de áreas protegidas o preservación de los conocimientos tradicionales. Naín criticó el Convenio de Biodiversidad por ser "un negocio de los países desarrollados y las empresas, que regulan y ponen precio a la biodiversidad", mientras que los pueblos indígenas son considerados observadores.

Naín contó cómo los indígenas están siendo "amenazados y desplazados" de sus regiones: primero con la colonización de sus tierras y después, por parte de los propios estados que anexionan sus territorios a los de la jurisdicción nacional. Una de las paradojas que sufren los indígenas se da con la creación de áreas protegidas, un instrumento que 'a priori' protege la biodiversidad, pero que en la práctica está suponiendo una amenaza para las comunidades indígenas y sus conocimientos, ya que las normas de las áreas protegidas les impiden usar los recursos que han venido utilizando a los largos de cientos de generaciones.

"No nos matan con armas, nos matan culturalmente, porque al no tener acceso a los recursos, cortan nuestra vida cultural, y esa es la forma que tienen los estados de excluirnos", comentó este mapuche chileno, que ha sido invitado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio español de Medio Ambiente a participar en la COP8. En Chile, el 10 por ciento de la población es indígena mapuche.

El Foro Internacional Indígena para la Biodiversidad está integrado por unos 150 pueblos indígenas de todos los continentes y reclaman desde hace una década tener voz propia en las Cumbres y que sus conocimientos tradicionales sean protegidos