La ONG Turma do Bem ofrece sanidad bucal a miles de adolescentes de forma gratuita
RÍO DE JANEIRO, 3 Jun. (Notimérica) -
El 11% de los brasileños --alrededor de 16 millones de personas--, no tiene ningún diente, según la Investigación Nacional de Salud divulgada este martes, que también revela que todavía hay un 47% de brasileños que no se lavan los dientes como mínimo dos veces al día.
El número de brasileños está directamente relacionado con la pobreza y los bajos índices de escolaridad: el porcentaje de los que no tienen dientes es más alto entre los analfabetos o los que no tienen la educación básica completa (22,8%) y entre los mayores de 60 años (41,5%).
Y es que la delicada salud bucal de los brasileños tiene mucho que ver con los bajos índices de desarrollo que todavía tienen varias regiones del país, y que hacen que 30 millones de niños no sepan lo que es ir al dentista, como denuncia la ONG Turma do Bem, un proyecto odontólogico que atiende voluntariamente a personas necesitadas.
El fundador de la Turma do Bem, el dentista Fábio Bibancos, ha explicado en declaraciones a Notimérica que la situación en Brasil no cambiará hasta que las autoridades y la sociedad en general se den cuenta de que la falta de odontología va de la mano con problemas sociales serios.
"Una persona que no tiene dientes no tiene un trabajo adecuado, una alimentación correcta, unas relaciones personales normales. Todo eso lleva a un ciclo de pobreza y exclusión social. Quien no tiene dientes es un excluido socialmente", resume.
UN PROYECTO PIONERO
Bibancos lidera desde hace 12 años un proyecto pionero en todo el mundo en el que 16.000 dentistas atienden a niños de entre 11 y 17 años; no solo en Brasil, también en otros 13 países de América Latina y en Portugal. "Son jóvenes pobres que están dentro de un ciclo de pobreza. Detrás de cada boca destruida hay familias abandonadas, situaciones de miseria que impiden que tengan salud bucal".
El dentista, uno de los más conocidos de Brasil, confiesa que empezó su labor filantrópica casi de casualidad: al principio pensaba que la clave estaba en la prevención, así que en 1995 escribió un libro muy pedagógico titulado 'Um sorriso feliz para seu filho' ('Una sonrisa feliz para su hijo'), que tuvo mucho éxito entre padres y profesores.
Empezó a dar conferencias en escuelas privadas y todo funcionaba a la perfección, hasta que el libro se reeditó en una versión más económica y llegó a las escuelas públicas. Allí se topó con una realidad diferente: "Yo seguía diciendo lo mismo que en mis charlas en los colegios privados, pero cuando miraba aquellas bocas destruidas, con mi formación elitista de dentista, no sabía a dónde mandarles", confiesa.
PIDE MÁS ESFUERZOS DEL GOBIERNO
"Empecé a llevar a algunos chavales a mi clínica, pero el tema fue creciendo, así que pedí ayuda a los amigos, hasta que se transformó en esta organización", detalla, al tiempo que reclama más esfuerzos al Gobierno para incorporar la odontología a la red de salud pública para democratizar la sanidad bucal.
Por el momento, Bibancos, como el resto de expertos, insiste en la necesidad de lavarse los dientes tres veces al día y de usar el hilo dental para evitar problemas graves, como enfermedades periodentales, inflamaciones de carácter crónico que empiezan en las encías y que con el tiempo pueden provocar pérdida del tejido que afianza los dientes.
En casos más extremos este tipo de enfermedades pueden incluso provocar dolencias cardiacas, porque el cuerpo trabajará excesivamente para eliminar las bacterias del sistema circulatorio. También hay estudios que aseguran que las mujeres con enfermedades periodontales tienen el triple de posibilidades de tener bebés prematuros.